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Viernes 29 de Marzo del 2024 04:26

Chuquicamatina llevará la vida de la mujer minera al teatro

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La Redacción
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mineraEn etapa de Investigación se encuentra la actriz Chuquicamatina Camila Rojas Colina, quien con el patrocinio de SERNAM, el Consejo Regional de Cultura y Seremi de Minería de la Región de Antofagasta, ha visitado diversas faenas mineras entrevistando a mujeres del rubro y averiguando como es la vida de una mujer minera y cuáles son sus motivaciones

Llevaba los dos últimos años visitando la Compañía de Teatro “Double Edge Theatre” en Estados Unidos, la primera vez fue para hacer una inmersión artística y la segunda para ser parte de su espectáculo de verano. La experiencia vivida en esta compañía le hizo tomar una perspectiva distinta sobre el Teatro, motivando a la actriz a trabajar sobre un tema que poco se ha mencionado en la escena chilena “La Mujer Minera”. En la siguiente entrevista, Camila nos cuenta las razones y motivaciones de éste proyecto.

La Mujer Minera, una mujer moderna

¿Qué te motivó a hacer este proyecto Teatral sobre la Mujer Minera?

Porque me siento un poco minera (ríe) Siento que en mi sangre tengo harto de minera. Nací en el campamento de Chuquicamata y toda mi familia siempre se ha relacionado con la minería. Por lo que nunca ha sido un tema ajeno a mí. Por otra parte, aparte de ser actriz, me he dedicado al Coaching Ontológico en la empresa Jota2erre Innovaciones y he tenido la fortuna de conocer más profundamente el mundo de los mineros a través del Coaching. El Coaching me ha mostrado el lado b del mundo minero, el lado sensible, vulnerable que no se deja ver fácilmente. Y sobre ese lugar más escondido, es el lugar en el que está basado mi proyecto.

¿Cómo así?  ¿Podrías explicarlo?

Me refiero a que el mundo minero se caracteriza por ser duro. Hay toda una cultura de hombres fuertes. Ahora se han ido sumando las mujeres y han ido diversificado el entorno pero sigue siendo duro. Hay una canción de Los Pampinos que dice “En Chuquicamata saben lo que es sentirse como hombre” haciendo alusión a la vida que tiene que soportar el minero, un trabajo en un clima extremo, algunos tienen que estar lejos de la familia, el sistema de turnos, la soledad, el trabajo en sí que puede ser muy peligroso, etc. Pero hay todo un universo debajo de esa “cultura de fuertes”, hay personas que se levantan día a día a trabajar para sus familias, para cumplir sus sueños, por sus hijos y seres queridos.

actrizHay una razón de vivir mucho más grande que la del trabajo en sí, cuando uno va de visita a una empresa te explican cómo funciona todo, los cargos, el procedimiento, las personas te dicen “cómo se proyectan en la empresa” pero cuando ya pasas esa primera etapa de conversación y entras a la historia de la persona te das cuenta que los motivos para que esa persona trabaje son muy personales. Una vez estaba haciendo un taller en una Minera y el jefe le estaba hablando a su equipo de trabajo, pero el equipo no enganchaba con él, no lo validaban, no lograban conectarse. Y yo le pedí al jefe que dejara de hablar por unos minutos y que le dijera a su equipo por qué razón se levantaba a trabajar todas las mañanas. Y él respondió con orgullo “Para alcanzar los logros y las metas trazadas”.

Sabes que esa respuesta causó mucho rechazo en la gente, era una respuesta automatizada, poco real. Así que pedí que respondiera nuevamente, pero que esta vez cerrara los ojos y se tomara un tiempo antes de hablar “¿Por qué razón te levantas a trabajar todas las mañanas?” Y después de un suspiro y con los ojos cerrados respondió “Por mi hija y por mi mujer”. Y sabes, fue tan real lo que dijo que produjo un silencio rotundo en la sala.  Muchos se emocionaron hasta las lágrimas.

O sea, derrumbaron el mito del Jefe minero rudo…

Exacto. Debajo de todos los cargos y títulos hay una persona, con todo un universo de emociones y de historias. Y nos hemos olvidado a hablar como personas entre nosotros. De eso se tratará mi obra de teatro, de la persona que hay debajo de todos esos títulos. En este caso, de la persona que hay detrás de la Mujer Minera.

¿Cómo crees que afecta la inserción de las mujeres en la minería?

Creo que es un absoluto complemento. He estado visitando faenas mineras y entrevistando tanto a hombres y mujeres. Y para nadie ha sido fácil el cambio. El mundo minero era un mundo destinado a los hombres y a las mujeres les estaba prohibida la entrada porque traían mala suerte. Imagínate romper un mito como ése. Y fíjate que hay estudios que dicen que en las empresas donde hay mujeres son más productivas.

Te puedo decir que eso me lo han dicho hombres mineros de primera fuente, que ha sido muy positivo que existan mujeres en sus equipos de trabajo, que las mujeres son más cuidadosas, analizan mejor las situaciones, son más ordenadas, más efectivas, más rigurosas. Que ha sido muy beneficioso. Claro, por otro lado está el tema de la maternidad, que en Chile a las empresas les ha costado asumir ese tema y no sé si las mineras son la excepción. Creo que sigue existiendo una mirada de desventaja hacia las mujeres embarazadas.

En tus visitas a faenas mineras, ¿Cómo has visto a la mujer minera?

Como una mujer increíble. Para mí la mujer minera es un nuevo referente de mujer moderna. Es definitivamente una mujer que rompe esquemas. No cualquiera es capaz de ponerse unos bototos de seguridad e ir a trabajar al cerro (como le dicen ellos) a un mundo que aún sigue siendo de hombres. Son mujeres muy seguras, con mucho carácter. Lo que ojo, para un hombre decir que una mujer tiene carácter es sinónimo de mal genio, y no es así.

Una mujer con carácter es una mujer que sabe lo que quiere, lo que le gusta, tiene claro sus límites y lo que quiere lograr en la vida. Es una mejor que rompe el machismo propio de nuestro país. Yo crecí en una familia muy tradicional con un padre proveedor y madre encargada de la casa, las labores estaban muy separadas en ese sentido, mi papá no le decía a mi mamá como manejar la casa y mi mamá tampoco le decía a mi papá como debía dirigir su trabajo. Pero hoy en día la mujer minera no busca un proveedor, busca un compañero, alguien con quien pueda repartir roles, con quien pueda compartir responsabilidades, cocinar juntos un almuerzo.

Es una mujer que está creando una nueva familia chilena, donde la mujer no sólo es proveedora de sí misma, sino que en varios casos ha sido una grata sorpresa descubrir que es el marido el que se queda en la casa cuidando los hijos. Sea como sea, es un nuevo Chile el que están construyendo. Y eso es algo grandioso para las nuevas generaciones.

Y por último, con lo que has visto en tu investigación… ¿Qué les dirías a las personas que dicen que es injusto que los mineros ganen tanta plata y por ende, no están interesadas en nada minero?

Creo que vivimos en un Chile donde hay mucha injusticia, eso es cierto. No sólo a nivel empresarial, sino que también en el sector de la salud, de la educación, de la cultura, etc. Pero lo que puedo decir en base a mi investigación, y que mejor tomar el ejemplo del Sr. Luksic que se refirió a sí mismo como “poderoso”. Yo puedo decir que he visto personas poderosas de verdad y eso son los operadores de la mina.

Los que día a día se suben al camión, a la pala, al aljibe, a los equipos de apoyo. Personas que trabajan 12 horas diarias en una pega solitaria, lejos de sus familias, perdiéndose el día a día de sus hijos por darles una vida mejor. Eso es poderoso, porque no son sólo personas que lo dan todo por sus seres queridos, y deben trabajar en un entorno peligroso, sino que son los que están encargados de la producción de la mina, sin ellos no hay producción. Si ese operador de camión no hace su trabajo, no hay producción. Y los clientes no recibirían su producto. No sé cómo será el mundo de los ejecutivos mineros, pero sé que el mundo de los operadores es bien duro y sacrificado y se merecen cada peso que ganan.

Son personas que después van a sufrir secuelas en su salud por toda la contaminación a la que han estado expuestos. Me saco el sombrero por ellos, y me lleno de orgullo cada vez que veo a una mujer subirse a un camión. Ese el poder de verdad, llenarse de fuerza para ir a trabajar y sacar adelante a su familia.

 

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