Una trágica escena remeció el aeropuerto de Milán-Bérgamo Orio al Serio, en el norte de Italia, luego de que un hombre falleciera tras ser succionado por la turbina de un avión que se preparaba para despegar. El vuelo afectado era un Airbus A319 de la compañía española Volotea, con destino a Oviedo, España, que tenía a bordo a 154 pasajeros y seis miembros de tripulación.
El incidente ocurrió mientras la aeronave realizaba maniobras previas al despegue, momento en el cual la víctima, identificada como Andrea Russo, de 35 años, logró acceder de forma irregular a la pista a través de una salida de emergencia ubicada en la zona de retiro de equipajes.
De acuerdo con la prensa italiana, Russo llegó al terminal aéreo en su vehículo personal, un Fiat 500 rojo, y se dirigió corriendo hacia la pista. Un video difundido en redes sociales muestra el momento en que el hombre es perseguido por personal de seguridad antes de lanzarse frente a una de las turbinas encendidas del avión. El impacto fue fatal.
El comandante del vuelo y los trabajadores presentes quedaron visiblemente afectados por la situación. Testigos indicaron que se escuchó un fuerte estruendo y que desde el interior del avión las azafatas pidieron a los pasajeros no mirar por las ventanas. Más tarde, se confirmó que se trataba de una persona que no formaba parte del pasaje ni del personal aeroportuario.
Investigación en curso
La Fiscalía de Bérgamo abrió una investigación por incitación al suicidio, aunque por el momento no existen sospechosos bajo investigación. Las autoridades también revisan posibles fallas en las medidas de seguridad del aeropuerto, que es el tercero con mayor flujo de pasajeros en Italia.
El tráfico aéreo fue suspendido por cerca de dos horas, mientras personal de emergencia y equipos forenses realizaban los peritajes correspondientes. El vuelo afectado despegó más tarde, a las 16:43, y aterrizó en Asturias sin nuevos contratiempos.
Apoyo a pasajeros y tripulación
Volotea emitió un comunicado expresando su “profundo pesar por este trágico suceso” y confirmó que tanto los pasajeros como la tripulación se encuentran en buen estado físico, aunque visiblemente afectados. La compañía informó que se les brindó apoyo psicológico en Bérgamo y también en Asturias.
Andrea Russo residía en Calcinate, cerca de Bérgamo. Según medios locales, había atravesado problemas de salud mental y de consumo en el pasado, aunque recientemente se encontraba en proceso de recuperación. La difusión del video generó gran impacto en redes sociales y medios europeos.
La investigación continúa para esclarecer cómo fue posible que una persona accediera a una zona restringida y se acercara a una aeronave en plena operación, a pesar de los protocolos de seguridad vigentes.