El hombre acusado de profanar tumbas en el Cementerio General de Santiago fue enviado a prisión preventiva este martes, luego que el tribunal rechazara la solicitud de su defensa para declararlo inimputable por razones de salud mental. Se trata de Diego Soto Montero, quien fue formalizado por ultraje de sepultura, entre otros delitos.
Soto Montero fue detenido por la Policía de Investigaciones (PDI) en el Hospital Psiquiátrico de Recoleta, donde había sido ingresado tras deambular herido y con signos de alteración mental. En su domicilio, los detectives encontraron un cráneo humano y otros restos óseos cuya procedencia está siendo investigada.
Según los antecedentes, uno de los cráneos hallados pertenecería a la doctora Ernestina Pérez Barahona, la segunda mujer en obtener el título de médica en Chile. Además, se confirmó que el mausoleo del expresidente Salvador Allende también fue vandalizado durante los actos de profanación.
Durante la audiencia de formalización, la defensa intentó alegar inimputabilidad por enajenación mental, argumentando que su cliente no estaba en condiciones de enfrentar un proceso penal. Sin embargo, el tribunal desestimó la solicitud, considerando que no existían antecedentes suficientes para acreditar dicha condición.
Tras esto, el imputado fue formalizado y quedó bajo la medida cautelar de prisión preventiva, mientras continúa la investigación en su contra por los delitos de ultraje de sepultura, profanación y exhumación ilegal.