Una violenta organización integrada por ciudadanos extranjeros fue desarticulada en Antofagasta luego de un amplio operativo liderado por la Fiscalía Regional y las secciones especializadas OS7 y OS9 de Carabineros. En los allanamientos se hallaron construcciones tipo búnker, presuntamente utilizadas para almacenar droga y ocultar evidencia.
El procedimiento permitió la detención de seis imputados de distintas nacionalidades, quienes serían parte de una red criminal que operaba al interior del campamento “Mujeres cabeza de familia”, en el norte de la ciudad.
De acuerdo con la investigación, el grupo sería responsable del secuestro agravado de un ciudadano colombiano, quien fue torturado y golpeado durante varias horas en una vivienda del campamento, donde habría sido retenido bajo amenazas y agresiones constantes.
Según antecedentes del caso, la víctima logró escapar en un descuido de sus captores, presentando lesiones atribuibles a golpes con objetos contundentes, quemaduras por calor y electricidad, y la mutilación parcial de una oreja producto de una mordida.
Tras el hecho, la Fiscalía instruyó una serie de allanamientos en distintos domicilios, donde se recuperó evidencia relacionada tanto con el secuestro como con el acopio y distribución de drogas. En uno de los inmuebles se hallaron construcciones de material sólido tipo búnker, utilizadas —según la investigación— para resguardar estupefacientes y dinero.
Los seis detenidos fueron aprehendidos en una vivienda del sector Punta Itata, donde intentaban ocultarse de la policía. El Juzgado de Garantía de Antofagasta decretó su prisión preventiva por peligro para la seguridad de la sociedad y fijó un plazo de investigación de 90 días.
El Fiscal Regional, Juan Castro Bekios, precisó que la organización estaba compuesta principalmente por ciudadanos colombianos y destacó su alto nivel de violencia.
“Esta investigación comienza por una víctima que llega a un servicio de salud con graves lesiones tras haber sido torturada por integrantes de esta asociación criminal, lo que da cuenta del nivel de peligrosidad que tenía y de las acciones que era capaz de realizar”, señaló el persecutor.
Durante los próximos meses, el Ministerio Público continuará realizando diligencias para establecer la posible participación de los imputados en otros delitos violentos ocurridos en la ciudad.