Las elecciones de este domingo dejaron en evidencia un reordenamiento profundo del electorado en Antofagasta y en gran parte del país. El sorprendente –aunque no tan inesperado para algunos analistas– desempeño de Franco Parisi (PDG) y el histórico triunfo del diputado Sebastián Videla (IND-PL) revelan transformaciones sociopolíticas que están reconfigurando el comportamiento electoral en Chile.
Consultados por Diario Antofagasta, los doctores en Ciencia Política Francis Espinoza y Cristian Zamorano entregaron claves para entender estos fenómenos y anticipar qué podría ocurrir en la segunda vuelta presidencial.
Un voto pragmático, emocional y desconectado de la política tradicional
Para la doctora en ciencias políticas, Francis Espinoza, los resultados del domingo confirman que tanto Parisi como Videla representan liderazgos no tradicionales que calzan particularmente bien con el contexto social de Antofagasta.
“En una región tan pragmática, tan neoliberal, el voto pragmático es fundamental. Mucha gente vota por quien aparece ahí, donde está ocurriendo la contingencia, casi como si fueran reporteros del crimen”, señala.
Espinoza identifica algunas similitudes estructurales entre Parisi y Videla:
- Liderazgos individuales, centrados en la figura y no en el partido.
- Estrategias basadas en la contingencia, reaccionar rápido a problemas visibles.
- Conexión emocional con la ciudadanía mediante mensajes muy simples, directos y fácilmente digeribles.
- Construcción de una base fiel, una suerte de “army” similar al fenómeno del K-Pop, con seguidores altamente leales.
Según la académica, ambos capitalizan el desgaste de la política tradicional, y se declaran “outsiders”, pese a ocupar cargos o competir de manera continua:
“Se aprovechan de esta idea de ser externos a la política en un contexto de deslegitimación. Eso está completamente instalado en Chile y especialmente en el norte”.
Masculinidades políticas, voto minero y rechazo a las agendas identitarias
Francis Espinoza va más allá y explica que en el caso de Parisi –y en parte aunque menor medida Videla– se apoyan en un votante masculino que está cansado de ciertos discursos de género:
“Hay presencia de un tipo de masculinidad que se siente agotada de las políticas identitarias. Parisi encarna una ‘nueva masculinidad’, pero más masculina aún, incluso más machista”.
Además, añade un elemento clave:
el voto minero, históricamente decisivo en Antofagasta, donde prima una cultura laboral y social distinta a la del resto del país, podría haber influido tanto en Parisi como en Videla.
Cristian Zamorano: “Conectan con la gente común, como antes lo hizo Jonathan Velásquez, Karen Rojo o Pedro Araya padre”
Para el politólogo Cristian Zamorano, el fenómeno no es nuevo: tiene raíces profundas en la historia política regional.
“Hace años hablamos de falta de representatividad. Parisi y Videla encarnan justamente lo contrario: conectan con los ciudadanos de a pie y sus problemáticas. Es el mismo fenómeno que vimos con Jonathan Velásquez, Karen Rojo, la fiscalizadora. En su momento, Pedro Araya padre también representó eso”.
Zamorano destaca tres factores claves:
- Forma de comunicar eficiente, directa, sin tecnicismos.
- Uso estratégico de redes sociales, donde los partidos tradicionales aún no se adaptan.
- Identificación con los problemas cotidianos de las personas.
“No es solo lo que dicen, es cómo lo dicen. La gente siente que hablan su idioma”, remata Zamorano.
La izquierda enfrenta un panorama difícil para la segunda vuelta
Ambos expertos coinciden en que la izquierda llega debilitada y con escasa conexión territorial, especialmente en regiones como Antofagasta donde fenómenos como Parisi, el PDG, Republicanos y figuras independientes han ocupado el espacio electoral.
Zamorano es directo:
“La favorita para la segunda vuelta es la derecha con Kast. Y tendrá que pronunciarse sobre temas valóricos para mostrar el rostro que tenía antes. Pero los números no mienten: hay un auge de los nuevos partidos de derecha en regiones”.
Espinoza, por su parte, advierte que la deslegitimación partidaria es tan profunda que la izquierda no solo compite contra Kast, sino contra la erosión de su propia base tradicional.
Un escenario abierto, pero con tendencias claras
El análisis de ambos expertos permite identificar tres conclusiones:
1. El votante del norte no quiere política tradicional
Prefiere liderazgos cercanos, directos y con soluciones concretas, no programas extensos ni discursos abstractos.
2. Redes sociales y presencia mediática superan a las estructuras partidarias
Tanto Parisi como Videla, más allá de sus claras diferencias, construyen seguidores más que votantes.
3. La segunda vuelta será difícil para la izquierda
El crecimiento de la derecha, del PDG, de Republicanos y de liderazgos locales desafía la lógica tradicional de alianzas políticas.