El caso Democracia Viva ha generado un terremoto político en el país, y en el centro se encuentra la diputada Catalina Pérez.
La parlamentaria de Revolución Democrática tomó un rol clave dentro del oficialismo. Sin embargo, los recientes acontecimientos, puntualmente el cuestionado convenio del Minvu con la fundación que preside su pareja, han puesto en tela de juicio su carrera política y el de la coalición gobernante. No son pocos quienes se preguntan si estamos presenciando la muerte política de la diputada.
EN POLÍTICA NO HAY MUERTOS
Para el Doctor en Ciencias Políticas, Cristian Zamorano, la imagen de Catalina Pérez se verá dañada durante varios años, especialmente en un contexto de crisis como el actual. También destaca que el caso Democracia Viva complica aún más el panorama para el oficialismo, ya debilitado por otras derrotas electorales.
“En política nunca hay muertos. Hay numerosos personajes que han sobrevivido a periodos duros, está el caso de Provoste en Chile o casos en el mundo entero, en política nadie está muerto. Sí es un momento difícil y su defensa es muy mala. Va a estar dañada numerosos años. Como estamos en situación de crisis, se va ver afectada aún por más tiempo“, indica Zamorano.
Asimismo, considera que “el oficialismo con esto se complica mucho el panorama, porque sufrió dos derrotas electorales enormes que son el rechazo a la propuesta constitucional y luego la victoria de republicanos en los nuevos consejeros onstitucionales y ahora aparece este caso. Es la punta del iceberg que sin duda involucra a toda la clase política. Muchos verán en Catalina Pérez que ella dio el último empujón al gobierno provocando una implosión. Es un golpe muy decisivo“, indica.
EL CASO CAVAL DEL FRENTE AMPLIO
Para la Doctora en Ciencias Políticas, Francis Espinoza, el caso Democracia Viva podría convertirse en el “Caval” del sector político de Catalina Pérez, considerando que la problemática más profunda radica en el Frente Amplio, ya que ha adoptado una postura de superioridad moral frente a la vieja política, pero ha caído en los mismos vicios y contradicciones.
“Para Catalina Pérez será su caso Caval. Si bien hasta el momento ha salido bastante ilesa para la complejidad de la situación y los actores que se han ido involucrando (fiscalía, contraloría, ministerio, etc.), pero hay mucho abuso de género en la política“, señala.
“La problemática de discusión más profunda que yo veo es que el Frente Amplio como conglomerado ha instalado una “moralina hegemónica” de superioridad ante la vieja política bipolarizada (izquierda-derecha)“.
“Esto me recuerda a la periodista turca Ecce Temelkuran cuando relata su experiencia con el nuevo Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP): “… Puede considerarnos un movimiento, el movimiento de los virtuosos […] Nosotros somos más que un partido. Vamos a cambiar por completo este sistema corrupto” (2019: 25). Sin embargo, se han convertido en una Nueva Mayoría 3.0 con los mismos vicios políticos y vistiendo el sayo antiguo de la social democracia“, señala.
LAMENTO POR LOS LÍDERES JÓVENES
El magister en Organizaciones Públicas, Ricardo Andrade, destaca que la política no solo requiere buena voluntad, sino también compromiso con la causa que se defiende y expresa su pesar por los militantes de RD que no están involucrados en este caso y que creen en una nueva forma de hacer política.
“Lo lamento por los militantes de RD porque la gran mayoría de ellos no saben ni participan de esto. Lo lamento por los líderes jóvenes que creen, de verdad, en una nueva manera de hacer política y que se verán afectadas por muchos años en sus proyectos políticos y personales“, expresó.
Asimismo añade que este caso deja al descubierto nuevamente que “la política no es solo buena voluntad, es también compromiso con la causa que se abriga. Esa causa es la esperanza de muchos. Lamento por los beneficiaros de ese proyecto, que bien o mal ejecutados, no lograrán solucionar sus demandas urgentes“.
El caso Democracia Viva ha generado un profundo impacto en la carrera política de la diputada Catalina Pérez. Si bien los expertos consultados tienen visiones divergentes, coinciden en que su imagen se verá afectada en el corto y mediano plazo.
Aunque no se puede afirmar con certeza si estamos ante su muerte política, queda claro que enfrenta un desafío significativo para mantener su posición en el ámbito político.
El caso también tiene repercusiones más amplias en el oficialismo y en la percepción de la clase política en su conjunto. Solo el tiempo dirá cuál será el desenlace final de esta controversia y su impacto en el futuro de Catalina Pérez y la política regional.