Como una obra que tiene una relación directa con el plan de ordenamiento comunal que impulsa la actual administración de la Municipalidad de Antofagasta, catalogó el alcalde Sacha Razmilic la inauguración de las obras de ampliación del corralón, ubicado en el sector norte de la ciudad. Actividad a la cual asistieron distintos directores de la casa edilicia, representantes de Carabineros y el presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA).
El proyecto implica un aumento de la superficie que existía que era de 11 mil metros cuadrados a una total de 21.000 metros cuadrados, generando una mayor capacidad de acopio de vehículos que pasará de 350 espacios a 700 cupos, con una optimización final de hasta 900 escaños considerando motos y sólo vehículos city car o sedán.
Las mejoras también consideraron el cierre perimetral con placas y postes de hormigón, remodelación de todas las instalaciones existentes, mantención de estructuras metálicas, adaptación de baño para cumplir diseño de accesibilidad universal. De hecho, esto fue una de las preocupaciones del concejal Camilo Kong, quien planteó la importancia de que toda obra considere además de mejoras estructurales, a las personas que trabajan en estos espacios.
Además, se considera un proyecto eléctrico, desarrollado a través de un sistema fotovoltaico, que permite aprovechar la luz natural y un positivo impacto ambiental. Junto a ello, las obras cuentan con los permisos de agua potable, dichas labores alcanzaron cerca de $969 millones de pesos, tras aprobación del Concejo Municipal.
Al respecto, el alcalde Razmilic indicó que la ampliación de estas dependencias tiene varios efectos, entre ellos, poner en operaciones sin limitantes las tres grúas municipales para el retiro de vehículos abandonados, mal estacionados y desde las comisarías, así como el decomiso de toldos del comercio ambulante, por lo que “estamos hablando muy en serio” sobre el ordenamiento comunal, invitando a mejorar las conductas de todos antes que llegar a estar sanciones.
Mientras que el coronel de Carabineros y prefecto de Antofagasta, Héctor Cabrera, detalló que el impacto es positivo para la labor policial, dado que permite trasladar vehículos que están a disposición de tribunales, como también aumentar la fiscalización que implica retiro de automóviles y motos que no tienen la documentación, entre otras razones.
Por su parte, el director de Administración y Finanzas del municipio, Alfredo Fuentes, explicó lo que implica el retiro de un vehículo desde el corralón, lo que requiere una serie de trámites en el juzgado de policía local como el pago de multa, en el Departamento de Rentas cancelar el bodegaje (días en que el móvil estuvo en estas dependencias municipales) y posteriormente retirar su automóvil.
También el concejal Ignacio Pozo indicó que éste era un hito importante porque permite descongestionar el centro, y que no se puede normalizar estacionar en cualquier parte, por lo que, si los vecinos no cambian su conducta, las grúas harán retiro de automóviles. Palabras a las que se sumó el presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), Marko Razmilic, quien destacó la importancia de despejar las calles de autos en abandono, entre otras situaciones que afectan a la ciudad.