El municipio de Antofagasta llevó a cabo un operativo especial para el retiro de enseres voluminosos en el casco histórico de la ciudad y sus alrededores, respondiendo a solicitudes de organizaciones vecinales del sector. Para ello, se instalaron cuatro bateas en puntos estratégicos, permitiendo que los vecinos depositaran muebles, electrodomésticos y otros objetos de gran tamaño que no pueden ser retirados por el servicio de recolección domiciliaria.
El objetivo de esta acción fue prevenir la proliferación de microbasurales y focos de insalubridad en espacios públicos, además de fomentar la responsabilidad comunitaria en el manejo de residuos voluminosos.
Desde la municipalidad reiteraron el llamado a no abandonar este tipo de objetos en la vía pública, ya que afectan la imagen de la ciudad, generan riesgos sanitarios y complican el uso de las calles y veredas. Asimismo, destacaron el apoyo y la participación de la comunidad en esta iniciativa.
Hay que reconocer el beneficio que significa que la municipalidad retire cosas de gran tamaño de la vía pública representa una economía para la población y ordenamiento en la ciudad.