Opiniones encontradas genera en la comunidad internacional la autoproclamación del diputado de la Asamblea Nacional (AN) en desacato Juan Guaidó como “presidente encargado” de Venezuela durante una marcha opositora en Caracas. De inmediato, fue reconocido por EE.UU., seguido de Canadá y varios gobiernos latinoamericanos, entre ellos el de Chile.

Mientras tanto, otros países expresaron su apoyo al mandatario constitucional Nicolás Maduro, entre ellos potencias como Rusia, China, Turquía e Irán.

El presidente ruso Vladímir Putin dialogó telefónicamente con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, y expresó su apoyo al Gobierno legítimo del país latinoamericano “en el contexto de la agudización de la crisis política interna, provocada desde el exterior”.

Según reza un comunicado publicado en la página oficial del Kremlin, el mandatario ruso subrayó que “una intervención externa destructiva viola las normas fundamentales del derecho internacional”.

En la conversación de este jueves, Putin “se expresó a favor de encontrar soluciones en el marco del campo constitucional, y superar los desacuerdos en la sociedad venezolana a través del diálogo pacífico”.

Asimismo, se informa que ambos mandatarios confirmaron su disposición mutua para continuar con la cooperación ruso-venezolana en varios campos.

El mismo día, El Ministerio de Exteriores de Rusia ha publicado un comunicado sobre la situación en Venezuela tras la autoproclamación de Juan Guaidó.

Según el mismo, “la juramentación de un ‘presidente encargado de Venezuela’ opositor, y su reconocimiento inmediato en esa calidad por parte de EE.UU. y varios Estados regionales, tiene como objetivo el aumento de la división en la sociedad venezolana”, así como “la desestabilización esencial de la situación política interna y una mayor escalada del conflicto”.

En cuanto al rol de Washington en esta situación, la Cancillería rusa indicó que ve “en sus acciones impertinentes una nueva demostración de desprecio total hacia las normas y principios del derecho internacional, un intento de desempeñar el papel de árbitro autoproclamado de los destinos de otras naciones”.

Por su parte, el gobierno de China expresó su repudio a la intervención extranjera en los asuntos internos de Venezuela y reiteró su apoyo al gobierno de Maduro en sus esfuerzos por mantener “su soberanía, independencia y estabilidad”.

Irán también se manifestó en el mismo sentido, al criticar la “injerencia abierta” de Estados Unidos. “Irán se opone a cualquier intervención en los asuntos internos de Venezuela, así como a las acciones ilícitas y no constitucionales, como intento de golpe de Estado”, señaló el vocero de la cancillería iraní, Bahram Qasemi.

Asimismo, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, reiteró su apoyo al gobierno constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, presidido por Maduro.

“Estamos en contra de la injerencia en los asuntos internos. Recientemente, algunos países latinoamericanos y Estados Unidos se han estado entrometiendo en los asuntos internos de Venezuela”, indicó.