Starbucks, SQM y Bravíssimo figuran entre las compañías sancionadas. Las amenazas a trabajadores, despidos injustificados, creación de sindicatos paralelos y bonos a quienes no están sindicalizados, son solo algunas de las prácticas cada vez más comunes entre las empresas para debilitar a los sindicatos.

Se trata de 14 empresas, cuyas sentencias en su contra fueron emitidas por juzgados de letras del Trabajo y divulgadas por la Dirección del Trabajo (DT).
Las sentencias de los tribunales durante el segundo semestre de 2013 significaron multas por 1.685 UTM, las que en su valor actual equivalen a $68.975.475.
Aparte de la aplicación de las multas de beneficio fiscal a las empresas condenadas, a través de estas sentencias los tribunales ordenan el cese inmediato de la conducta y disponen las medidas de reparación que sean pertinentes.
Pero el efecto más perjudicial para las empresas castigadas es que durante dos años, a partir de la sentencia ejecutoriada, no pueden ser proveedoras del Estado, según lo dispone el artículo 4 de la Ley 19.886. Es decir, quedan excluidas del Sistema de Compras Públicas del Estado por el periodo citado.
STARBUCKS: EL CAFÉ DEL ANTISINDICALISMO

Esta empresa, además ya había sido condenada en junio de 2012 y diciembre de 2011 por un total de 600 UTM.
Otra empresa del mismo rubro condenada esta vez es Bravíssimo, con 25 UTM. En la lista actual también hay dos empresas mineras: SQM Industrial S.A. y S.Q.M. SALAR S.A, ambas filiales de la Sociedad Química y Minera de Chile.
Una vez más, empresas del Transantiago figuran en esta lista. Esta vez se trata de Redbus Urbano S.A.
También hay empresas dedicadas a la educación: Se trata de Congregación Hermanas Maestras de la Santa Cruz, que cuenta dos condenas.