La región de Antofagasta continúa siendo una de las zonas del país con mayor incidencia de tuberculosis. Así lo informó la seremi de Salud (S), Leonor Castillo, quien detalló que durante 2024 se registraron 136 nuevos casos, lo que representa una tasa de 18,9 casos por cada 100 mil habitantes, muy por encima del promedio nacional de 15,8.
“La tuberculosis no está erradicada de nuestro país. Cada año se detectan más de 2.500 casos a nivel nacional. Por eso es necesario mantenerse informados y alertas ante posibles síntomas, sobre todo en las poblaciones de riesgo”, indicó la autoridad sanitaria.
La tuberculosis es una enfermedad causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis o bacilo de Koch, que afecta principalmente a los pulmones, aunque puede comprometer otros órganos. Se transmite por el aire, especialmente cuando una persona enferma tose y expulsa pequeñas gotitas que pueden ser inhaladas por otros.
Incidencia nacional y local
Según cifras oficiales, en 2023 se notificaron 2.973 nuevos casos en Chile, y otros 177 correspondieron a recaídas. La tasa nacional de incidencia ha ido en aumento tras la pandemia, pasando de 12,4 casos por 100 mil habitantes en 2020 a 15,8 en 2023.
Antofagasta se mantiene como la tercera región con mayor tasa de incidencia, después de Tarapacá y Arica y Parinacota. A nivel local, el 53% de los casos confirmados corresponde a población migrante, especialmente de países con alta carga de tuberculosis como Bolivia y Perú.
Síntomas y diagnóstico
El referente del Programa de Tuberculosis de la Seremi de Salud, Christián Lombardi, explicó que el síntoma más común es la tos con flema que dura más de dos semanas. A eso se pueden sumar fiebre, sudoración nocturna y pérdida de peso.
“El diagnóstico se realiza con un examen de laboratorio que es gratuito en el sistema público de salud para todas las personas, independiente de su previsión”, recalcó Lombardi.
Poblaciones de riesgo
Las personas con mayor vulnerabilidad ante la enfermedad son aquellas con sistemas inmunes debilitados, como personas mayores, pacientes con VIH o diabetes, personas en situación de calle y migrantes provenientes de zonas de alta incidencia. También se incluye a quienes han tenido contacto estrecho con pacientes diagnosticados con tuberculosis activa.
En el marco del Día Mundial de la Tuberculosis, que se conmemora cada 24 de marzo, las autoridades reiteraron el llamado a la detección temprana, especialmente en los grupos de riesgo, y a no subestimar los síntomas.
“La prevención y el diagnóstico oportuno son claves para evitar la propagación de esta enfermedad, que aún sigue presente en nuestro entorno”, concluyeron desde la Seremi de Salud.