Las aguas en la Municipalidad de Sierra Gorda se encuentran turbulentas últimamente, pues el concejal Diego Fernández Soto acusó al edil local, José Guerrero, de negar información primordial para el correcto ejercicio de su cargo.
Fernández aseguró que la primera autoridad local busca impedir el ejercicio de su función fiscalizadora, el cual le otorga la ley Orgánica Constitucional de Municipalidades.
“El municipio ha respondido en con los siguientes argumentos; tales como “que no son materias de mi competencia”, “que esta solicitada de manera errada e imprecisa”, “que no corresponde a un tema en el que yo deba pronunciarme”, expresó el oficio presentado al Contralor Marcelo Córdova Segura.
El profesional no se quedó ahí y entregó otro oficio, acusando a la Directora de Dideco de exponer “los oficios emitidos por este concejal, a las beneficiarias de los programas sociales, realizando un juicio de valor subjetivo, de estos oficios, documentos los cuales son acciones propias de mi función fiscalizadora”.
“Solicito un pronunciamiento de vuestra entidad sobre la procedencia de esta funcionaria, que en horario laboral realiza funciones que no son propias a su cargo que ostenta, y junto con ello, pone en tela de juicio funciones propias de un concejal”, aseguró el texto.
