El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta condenó este miércoles 30 de junio a Yerko Antonio Retamales Valdés a las penas efectivas de 6 años, 3 años y un día y 541 días de presidio, en calidad de autor del delito frustrado de homicidio simple y los delitos consumados de porte de elementos incendiarios y desórdenes públicos, respectivamente.
Los hechos se produjeron el diciembre del 2019, en el marco del estallido social, instancia en que el sujeto fue retenido y entregado a la policía por otros manifestantes.
En fallo unánime el tribunal integrado por los magistrados Paula Ortiz Saavedra (presidenta), Israel Fuentes Gutiérrez y Marcela Mesías Toro (redactora)– aplicó, además, a Retamales Valdés diversas accesorias legales.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que alrededor de las 21:40 horas del 16 de diciembre de 2019, la víctima conducía por avenida Andrés Sabella de la ciudad de Antofagasta, su vehículo, cuando al llegar a la esquina de 21 de mayo se encontró con el acusado Yerko Antonio Retamales Valdés, quien se encontraba en medio de protestas en el estallido social obstruyendo el tránsito.
En dicho contexto el acusado ordenó a la víctima no continuar por esa calle y desviar su tránsito bajo la amenaza de quemarle el auto si continuaba su marcha. No obstante, el conductor lo ignoró y reanudó lentamente la marcha de su vehículo, momento en que Retamales Valdés “encendió la mecha de una botella que en su interior contenía un líquido inflamable con presencia de hidrocarburos, comúnmente denominada ‘bomba molotov’, la que arrojó al vehículo del afectado, objeto que ingresó al interior fracturando el vidrio trasero izquierdo del móvil, por lo que inmediatamente se encendió el interior del vehículo, alcanzando las llamas la ropa del afectado quemándole la espalda”.
El tribunal consignó además que producto de ello la víctima fue rápidamente auxiliada por los propios manifestantes, quienes abrieron vehículo”pudiendo salir del móvil el afectado con su ropa en llamas, de modo que de no haber salido prontamente hubiera tenido un resultado fatal”.
Posteriormente fueron los propios manifestantes quienes detuvieron al acusado y lo entregaron a personal de Carabineros, que “le incautó una mochila de color negro marca ‘Extreme’ que portaba que, en su interior, mantenía una botella de plástico que contenía 3 litros de líquido inflamable y dos botellas de vidrio, es decir, artefactos incendiarios”, añade el fallo.
A consecuencia de las llamas, la víctima resultó con lesiones de carácter graves, según el informe del SML, consistentes en quemaduras en dorso y brazo derecho posterior, de tipo AB-B (segundo grado profundo), afectando al menos un 8% de la superficie corporal, que ocasionaron al afectado una incapacidad laboral superior a 30 días.