Dejando de lado todas las recomendaciones de distanciamiento social y a pocas horas del toque de queda, un prostíbulo vendía alcohol y mantenía su funcionamiento de manera clandestina en Calama.
La situación quedó al descubierto este miércoles, cuando Carabineros concurrió hasta la calle Sotomayor para verificar una denuncia a un local de venta clandestina de alcohol.
Los vecinos se encontraban preocupados por la concurrencia de personas al sector, por lo que solicitaron colaboración policial, el cual comprobó que en el lugar no solamente se vendía alcohol, sino que además funcionaba como un prostíbulo clandestino, encontrando en el lugar a 21 personas entre hombres y mujeres.
Producto del hecho se produjo un operativo en el sector que contó con apoyo militar, siendo incautadas las bebidas alcohólicas, además de producirse la detención de la regente del local, junto con el empadronamiento tanto de los clientes como de las trabajadoras sexuales.
Todos estos antecedentes fueron derivados a la Seremi de Salud y también a la Fiscalía Local de Calama para las acciones pertinentes.