Hace una década, una de las tradiciones más populares en los pueblos del norte era el “Velorio del Angelito”.
¿De qué se trata? Cuando muere un niño antes de los 3 años (en algunos casos antes de los 7) se le denomina “angelito”, pues sube directamente a los cielos porque en su cuerpo no existe pecado, es por eso que no se le debe llorar porque eso le haría mal al alma del fallecido.
La ceremonia consiste en un constante rezo del rosario y cánticos, a la media noche se realiza una cena con un licor llamado “gloriao”, relacionado con la gloria del niño y su llegada al paraíso. Se debe quemar incienso durante el evento.
Existe una mesa llamada “Mesa de los Santos”, en donde se colocan figuras religiosas, se prende una vela rodeada de flores blancas y se construye un altar, en donde se ubica al “angelito”, vestido con túnica blanca y unas alas.
El fallecido puede estar sentado, acostado o parado. En algunas ocasiones se le colocar un ramo de flores blancas en las manos.
