Reforma sanitaria del gobierno de Mariano Rajoy, del derechista Partido Popular, les quita beneficios a los inmigrantes. Organizaciones anunciaron protestas y acciones legales contra una medida considerada racista y discriminatoria.
Cinco mil chilenos que están sin sus papeles en regla en España se quedarán sin tarjeta de salud el 1 de septiembre, fecha en la cual -salvo los menores de 18 años- los denominados inmigrantes irregulares solo recibirán asistencia en urgencia y por embarazo.
La organización de chilenos Violeta Parra, como otras asociaciones de inmigrantes, se ha mostrado contra la exigencia de que quienes quieran mayor atención de salud deban pagar una mensualidad. Algo que publicó el diario El País y ha reconocido el Ministerio de Sanidad español.
La reforma sanitaria emprendida por el gobierno de Mariano Rajoy está causando rechazo en agrupaciones de inmigrantes, partidos progresistas y asociaciones de médicos, que anunciaron una manifestación para el día 1 de septiembre, cuando entra en vigencia la medida.
Víctor Sáez, vocero de la Asociación Violeta Parra, contó que “dentro de las actividades que estamos desarrollando está la realización de talleres formativos para explicar los alcances de esta ley que vulnera la Constitución española y tenemos previsto hacer el 1 de septiembre manifestaciones en distintas ciudades españolas: Madrid, Burgos, Alicante, Barcelona, entre otras“.
Sáez agregó que “se está estudiando recurrir a las Naciones Unidas en el artículo de los Derechos Humanos, a la Convención de Roma, a la propia Constitución española en su artículo 25 que asegura el derecho a la salud de los ciudadanos. Un grupo de abogados está estudiando estos temas para hacer una presentación en Estrasburgo o en el constitucional español“.
En tanto, Manuel Servera, portavoz del gobernante Partido Popular en la Comisión de Sanidad del Parlamento, aseguró que las reformas sanitarias cumplen con dictámenes de la Unión Europea.