El regreso de las movilizaciones estudiantiles en nuestro país, que vuelven a colocar al gobierno de Sebastián Piñera en un momento crítico, fue seguido con detención por parte de diferentes cadenas informativas del extranjero.
Con corresponsales de prensa en Santiago y la invitación a sus estudios de diversos analistas, la prensa internacional ha entregado una cobertura notablemente diferente a la de la mayor parte de la prensa chilena, centrándose en la fuerte represión a las manifestaciones estudiantiles y la constante negativa del gobierno a la educación pública, gratuita y de calidad.
“Catorce marchas simultáneas en Santiago. Las movilizaciones por varios puntos de la capital chilena se realizaron a pesar de que la comuna no otorgó el permiso que exige para ese tipo de protestas, por lo que los secundarios fueron prácticamente rodeados de carabineros. No sólo reclaman una educación gratuita y de calidad, sino también que los colegios públicos sean administrados por el Estado nacional y no por los municipios, como ocurre desde que así lo estableció una de las últimas leyes de la dictadura de Augusto Pinochet”, dijo en su columna el analista trasandino Pedro Brieguer, quien se ha ganado varios comentarios de agradecimiento de chilenos por decir palabras que parecen prohibidas en los medios nacionales.
