El viernes, el exalcalde de Vitacura, Raúl Torrealba, fue enviado a prisión preventiva luego de dos días de formalización por delitos de corrupción.
La medida cautelar fue decretada por la jueza María Carolina Herrera, en respuesta a la solicitud del Ministerio Público. Torrealba enfrenta cargos por fraude al fisco, asociación ilícita, delitos tributarios y lavado de activos, siendo acusado de liderar una organización criminal que defraudaba fondos desde la Municipalidad de Vitacura.
La decisión de prisión preventiva se fundamentó en la necesidad de evitar que el imputado continúe cometiendo delitos de lavado de activos y ocultando su patrimonio. Torrealba será trasladado al Centro de Detención Preventiva Santiago 1, considerando su estado de salud y su avanzada edad, que fueron expuestos en la audiencia por su defensa.
Otros exmiembros del municipio acusados de asociación ilícita quedaron con medidas cautelares menos restrictivas, como arresto domiciliario nocturno, arraigo nacional, firma mensual y prohibición de comunicarse entre ellos.
Entre los implicados se encuentran la colaboradora de Torrealba, Antonia Larraín, el exdirector de corporaciones “Vita”, Domingo Prieto Urrejola, el exdirector de Desarrollo Comunitario de la municipalidad, José Renato Sepúlveda, y los contadores Augusto César Silva Silva y Arnaldo Cañas González.
Durante su gestión como alcalde de Vitacura entre 1996 y 2021, Torrealba presuntamente desvió fondos públicos a través de las corporaciones “Vita”, transfiriendo montos a sus cuentas personales, incluso mediante el traspaso de sobres con dinero en efectivo.
Estos hechos salieron a la luz tras auditorías ordenadas por la actual alcaldesa, Camila Merino. Además, se reveló un informe de la Brigada de Lavados de Activos de la PDI que detalla más de 90 depósitos en efectivo realizados por conductores contratados por Vitacura a las cuentas de Raúl Torrealba y su esposa, María Soledad Simonetti, por un monto superior a los $85 millones.