El de la Presidente de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas ( ASIMET), Dante Arrigoni, señaló que el proceso que permite acceder a la ayuda con garantía estatal podría tardar meses. “Si el objetivo es evitar los despidos y darle continuidad a la actividad productiva, la plata la necesitamos la próxima semana”, advirtió.


Una señal de alarma entregó esta mañana el presidente de ASIMET, Dante Arrigoni, al
explicar que las medidas de apoyo financiero con garantía estatal  para las empresas, por
un monto de US$ 5.000 millones para hacer frente a la pandemia del covid-19, podrían
tardar meses en hacerse efectivas, con lo cual dejarían de cumplir su objetivo principal,
que es darle liquidez para asegurarles su continuidad, y evitar despidos.


Según advirtió, existen ciertas condiciones que hacen muy engorrosa la obtención de
dichos créditos con la banca privada y más aún cuando ya hay otras líneas crediticias. La
principal, es que estos nuevos préstamos deben tener prioridad de pago respecto de
cualquier otro crédito que tenga el cliente con toda la banca (lo que es muy probable que
así sea), lo que obliga a reprogramar previamente esas deudas con todos los bancos,
proceso que tomará un tiempo considerable, tomando en cuenta la premura que existe
hoy por liquidez.


“Es imposible lograr una reprogramación de los anteriores créditos en un lapso de días
porque será un procedimiento mucho más largo, y las necesidades de las empresas son
inmediatas”, afirmó Dante Arrigoni.


Además, se está solicitando que estos créditos con aval del Estado deban realizarse a
través de bancos con los que la empresa ya tenga un vínculo, por lo que la situación
anterior se dará en prácticamente el cien por ciento de los casos. “No existe la posibilidad
que las empresas soliciten financiamiento con un banco con el cual no tengan deudas
vigentes, lo que hará aún más engorrosa la posibilidad de acceder a estos nuevos créditos
con aval del Estado”.


“Valoramos profundamente la disposición del Gobierno de apoyar a la empresa en esta
catástrofe, pero tal como ha ocurrido en otros países, este apoyo financiero debería llegar
en cuestión de días. Así pasó en Suiza, donde en 48 horas operó el financiamiento, y lo
mismo en Estados Unidos, que no excedió de una semana. Las empresas no son capaces
de resistir mucho más. Si el objetivo es evitar los despidos y darle continuidad a la
actividad productiva, la plata la necesitamos la próxima semana”, advirtió.