El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta condenó a Rubén Alberto Ardiles Véliz a la pena efectiva de 15 años de presidio, en calidad de autor de 4 abusos sexuales impropios y 2 delitos de violación impropia reiterada de menores. Ilícitos perpetrados entre 2004 y 2015, en la ciudad.
En fallo unánime (causa rol 153-2017), el tribunal -integrado por los magistrados Ingrid Castillo Fuenzalida (presidenta), María Isabel Rojas Medar y Alfredo Lindenberg Bustos (redactor)- aplicó, además, a Ardiles Véliz las accesorias legales de interdicción del derecho de ejercer la guarda y ser oído como pariente en los casos que la ley designa; inhabilitación absoluta perpetua para cargos, oficios o profesiones ejercidos en ámbitos educacionales o que involucren una relación directa y habitual con personas menores de edad y la pena de sujeción a la vigilancia de la autoridad durante los 10 años siguientes al cumplimiento de la pena principal.
Una vez ejecutoriado el fallo, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
La sentencia dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que entre 2004 y 2005, Ardiles Véliz realizó en forma reiterada actos de relevancia y significación sexual en contra de la víctima J.A.G.V., abusos consumados en el baño de hombres de iglesia metodista pentecostal.
Asimismo, entre 2005 y 2007, C.A.V.R. fue víctima de actos abusivos de relevancia y significación sexual y de penetraciones anales. En tanto, desde 2010 y hasta diciembre de 2011, similares actos abusivos y penetraciones afectaron a la víctima J.I.G.V.
Finalmente, el condenado en diversas ocasiones abusó sexualmente de la víctima H.E.G.V., desde que estaba cursando segundo básico y hasta noviembre de 2015.