En sesión de Concejo Comunal, los ediles aprobaron rechazar de plano las externalidades negativas de la explotación minera, lo que incluye relaves, polución, depredación del oasis entre otros aspectos.
La sesión del concejo Municipal de este lunes 11 estuvo marcada por el desarrollo del punto referido a la ampliación del relave de desechos industriales conocido como Tranque Talabre, la situación fue ampliamente discutida en presencia de la Asesoría Medioambiental del municipio y de la Coordinadora Pro Defensa del Agua, entre otros asistentes.
En la opootunidad, se fue más allá de la situación de contingencia y se manifestó un voto político unánime por parte de los concejales y el alcalde que implica un rechazo a los relaves y a toda externalidad negativa proveniente de la explotación minera industrial.
El alcalde de la comuna, Esteban Velásquez Núñez, se refirió a las implicancias de la determinación del cuerpo colegiado de ediles: “Un acuerdo político que puede resultar histórico en la ciudad, porque distintas miradas políticas, sociales se unen al unísono y se provoca el rechazo por tanto de todas las externalidades negativas de la industria minera en la comuna, incluyendo los relaves y estos pasivos ambientales que tenemos como la depredación del oasis, el consumo de agua dulce del Río Loa”.
El alcalde Velásquez comentó que hoy la sensibilidad esta puesta en el riesgo que el relave tiene y lo han expresado: La ciudadanía, el gobierno comunal e incluso las mineras, “como se vienen futuras industrias mineras, ampliaciones, por lo tanto, queremos tener mayor participación en todo sentido y que por primera vez se escuche la voz de la comuna”, aseguró.
Esteban Velásquez, alcalde calameño, calificó de “mañoso” al actual sistema de calificación ambiental, pues no permite la real participación ciudadana, ”el sistema de evaluación ambiental es hasta cierta medida mañosos, coloca trampas invita a consultar, entre comillas, a participar, entre comillas, pero después los que deciden son organismos directamente pertenecientes al gobierno”, manifestó el jefe comunal.
El alcalde calameño hizo un llamado al intendente y al grupo de seremis que decidirán a que sopesen y que no den luz verde a este proyecto, si no están las condiciones y garantías que efectivamente no se producirá contaminación, que es la desconfianza que tenemos , sentenció el edil.
En tanto, Gisella Castillo, vocera de Pro Defensa del Agua, apuntó que su presencia en este tema tiene que ver con que se haga presente la responsabilidad social y moral de autoridades y ciudadanos frente a materias de contaminación ambiental: “creemos que ya es tiempo que hagamos frente como comunidad a esta situación medioambiental, porque no sólo está afectado el ambiente, si no que tenemos un problema de salud pública en la zona y en todas regiones mineras del país”, expresó.
La vocera de la Coordinadora Pro Defensa del Agua, dijo que lamentablemente el marco legal existente no protege a la ciudadanía, ”lamentablemente, en forma aleatoria, siempre se ha legislado para que las grandes empresas estén funcionando, yendo en desmedro de las comunidades, no sólo las indígenas, si no que a nivel país, acá en la zona tenemos problemas serios y todas las resoluciones que se toman son a puertas cerradas”, concluyó.
