Las medidas que surgieron luego de la preocupación por la hambruna y cesantía que se ha manifestado a nivel nacional, ha hecho que distintas familias y organizaciones se pongan la mano en el corazón y busquen la forma de ayudar a quienes más lo necesitan.
Tras los meses de cuarentena y medidas preventivas frente al COVID-19, distintas gobernaciones a nivel nacional han tenido que abastecer a quienes más lo necesitan con canastas familiares que contienen alimentos básicos para cubrir las necesidades.
Pero no han sido los únicos en entregar esta ayuda, ya que a nivel regional distintas personas han querido moverse por quienes no tienen, invitando a la comunidad a aportar con distintos elementos y alimentos.
Es así como ollas comunes en sector Caliche y Bonilla fueron muestra de la solidaridad entre los vecinos, sin selfies ni publicidad, bajo la consigna “el pueblo ayuda al pueblo”.
Asimismo, los vecinos de Cerro Paranal decidieron organizarse por edificio y recaudar alimentos, para llevarlos a quienes más lo necesitan.
Fundación por un Mundo Solidario realizó una campaña solidaria para los adultos mayores de Antofagasta que quedaron sin trabajo luego de esta crisis sanitaria, en donde recolectaban útiles de aseo, alimentos no perecibles y pañales para adultos.
Otro caso también se da en Calama en donde destinaron distintos lugares de la ciudad para que sean centros de acopio, en el marco de la campaña “Calama ayuda a Calama, porque tu vida nos importa”, esta comenzó el 5 de mayo y durará hasta el 29 de mayo
Otra de las campañas Solidarias de Calama es “ Todos por Calama”, donde el emprendimiento “Flea Tienda” formado por estudiantes de la UCN, respaldada por Fundación Mi Norte y otros emprendimientos quienes están asociados.
Está consiste en la recaudación de ropa de abrigo, alimentos no perecibles y útiles de aseo que serán destinados para las personas que más lo necesiten. “La idea vino por la realidad que estamos viviendo el país, que está crisis no solo está afectando a los contagiados sino también, a las personas que perdieron sus trabajos, se han visto afectadas de alguna manera”, “Como reflexión final, nosotros no quejamos de estar encerrados en la casa todo el día y no poder salir, pero hay personas que no tienen un techo donde pueden vivir tranquilos o no tiene agua ni luz, y deben estar pasando frío con el invierno y más encima deben seguir llevando sustento a sus casas, con la cuarentena se ven más complicados aún, entonces hacemos un llamado a tomar conciencia”.
