Durante la jornada de este Martes 22 de octubre, el Gobierno anunció que tras la renuncia de Marco Antonio Díaz, producida durante el pasado viernes para ser candidato a Gobernador Regional de Antofagasta, asume el cargo como nuevo Intendente Regional el ex Seremi del MOP, Edgar Blanco Rand.

Se trata del mismo funcionario que en plena crisis política participó en un escandaloso “piscinazo” protagonizado por autoridades de Gobierno, que se realizó tras la renuncia de Marco Antonio Díaz con un acto en el Hotel Antofagasta.

En la mencionada fiesta de piscina, participaron el Director Regional de Vivienda y Urbanismo de Antofagasta, Rodrigo Saavedra Burgos, quien subió a su cuenta de Instagram un video del “Piscinazo” protagonizado por Blanco y otras autoridades, etiquetados con la frase “los tengo a todos identificados”.

Todo lo anterior, mientras se realizaban movilizaciones sociales en el país, se decretaba Estado de Emergencia en la capital y se cuestionaba duramente al Presidente Sebastián Piñera por asumir una postura similar: Comía pizza con sus nietos mientras los ciudadanos enfrentaban graves problemas para regresar a sus casas.

Por esta razón no fueron pocas las críticas a estas autoridades por la total desconexión entre sus estilos de vida y la realidad de la inmensa mayoría de la población y que claramente no estaban disponibles para cumplir sus deberes en el contexto de la situación que vive el país, más aún en el caso de Blanco, quien en su calidad de Seremi del Ministerio de Obras Públicas era el encargado a supervigilar la infraestructura pública y la conectividad en la región de Antofagasta.

Todo ello, a horas de que las movilizaciones sociales se produjeran también en la región (ya estaban convocadas) y que existían sobradas razones para preveer lo que sucedería ya se registraban muestras de descontento en otros puntos del país además de la capital y que una habilidad esperable en autoridades de ese rango es capacidad de anticiparse a los conflictos.

Producto de la ausencia en plena crisis del ex Intendente Marco Antonio Díaz, cuya renuncia estaba programada con anticipación pero no se reevaluó a pesar de la situación en el país, recayó la responsabilidad de enfrentar la contingencia sobre los hombros de la Gobernadora de Antofagasta, Katherine López, como Intendenta Subrogante.

Los funcionarios de Gobierno involucrados no estuvieron disponibles para dar las explicaciones correspondientes a El Diario de Antofagasta a pesar de que se requirió con debida anticipación a sus equipos de prensa una versión oficial respecto al por qué disfrutaban de piscina temperada celebrando candidaturas políticas, mientras la sociedad chilena se manifestaba y sufría los efectos de un Estado de Emergencia y toques de queda, con la crisis social estaba a borde de estallar también en la región.

VIDEO