Sin duda una de las situaciones que mayor molestia causa a los automovilistas, ciclistas y peatones en las calles de nuestro país, es encontrarse con hoyos, “cráteres” o lo que en su momento fue denominado como “eventos”.
Una situación de la cual Antofagasta no se encuentra ajena y diferentes sectores de la ciudad presentan verdaderas trampas para vehículos, que pueden resultar dañados por deformaciones en el pavimento. Lo mismo acontece con peatones o ciclistas que pueden sufrir caídas y accidentes con graves consecuencias.
Frente a esta temática, surge el eterno deslinde de responsabilidades. Una autoridad culpa a la otra, una institución responsabiliza a la otra, y finalmente no se asumen públicamente responsabilidades.
Frente a este tema, lo mejor es revisar lo que dice la legislación al respecto. La Ley Nº 18.695 Orgánica Constitucional de Municipalidades, indica que las municipalidades deberán administrar los bienes municipales y nacionales de uso público, incluido su subsuelo, existentes en la comuna.
Así las cosas, las calles urbanas, incluyendo veredas y calzadas, son bienes nacionales de uso público, por lo que es el municipio el que debe asegurarse de que estos lugares estén en buen estado, velando por su correcta mantención a través de la coordinación interna entre el Departamento de Tránsito, la Secretaría comunal de Planificación (SECOPLAN) y la Dirección de Obras, entre otras.
De esta forma, las municipalidades deben llevar una estadística de las calles que requieren arreglos, para luego solucionarlo mediante recursos propios o postular a concursos de otros organismos.
Es ahí donde entran en juego de forma complementaria a la labor que debe realizar el municipio, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, el Gobierno Regional y la SUBDERE, entre otros, facilitando estos recursos. Pero lo anterior depende directamente de la gestión del municipio y su capacidad para desarrollar proyectos y postulaciones para obtener estos recursos.
Independiente de lo anterior y de forma complementaria, el MINVU es uno de los organismos de los que emanan los recursos para pavimentación urbanas y rural, tanto a nivel macro con proyectos locales de pavimentación participativa, donde participan las organizaciones comunitarias, como juntas de vecinos o comités de adelanto.
Además, desde 2018 se realizó una modificación a la Ley de Pavimentación Comunal, que facilita la tarea a las Municipalidades. En ella se indica que los Municipios del país podrán reparar directamente los hoyos de emergencia de sus calles, veredas y ciclovías cuando se trate de “eventos” que son de hasta 20 metros cuadrados. Si las dimensiones de los “eventos” superaran el límite definido y requirieran una intervención mayor, los Municipios deberán realizar proyectos, sometiéndose a la supervisión y solicitar los permisos al MINVU.
Todo lo anterior, es relacionado con las calles urbanas. ¿Qué sucede con los hoyos y “eventos” en las carreteras o autopistas?
Es la Dirección de Vialidad del Ministerio de Obras Públicas (MOP), el organismo administra los caminos públicos que están fuera de la responsabilidad de las municipalidades, a través de contratos globales y conservación por administración directa. Es así que este organismo administra los caminos o vías rurales, excepto en algunos casos, donde ha determinado entregar la responsabilidad a concesionarias, para determinados tramos de las rutas.
Las concesionarias son empresas privadas que tienen a cargo la construcción y/o mantención de autopistas, que están dotadas de peajes en los que se cobra a los automovilistas que transitan por estas vías, a cambio de obtener un buen servicio en materia de buen estado de mantenimiento y seguridad en estas rutas.
¿Cómo reclamar si he sufrido un accidente?
En caso de que usted sufra un accidente por la presencia de hoyos en las calles o algún desperfecto no señalizado, lo primero que es dejar constancia ante Carabineros.
Posteriormente, lo que corresponde es identificar el organismo público al que pertenece la calle o carretera en mal estado y realizar el reclamo correspondiente. Si es urbana, la responsabilidad recae en las municipalidades. Si es una carretera rural, la responsabilidad es del MOP, salvo si es una vía concesionada, caso en el cual la empresa concesionaria es responsable de los daños por mal estado de las autopistas.
Finalmente, de ser necesario la persona interesada puede realizar una demanda civil en contra del servicio que tiene a cargo la mantención de la vía cuyo mal estado ocasionó el accidente.
