Durante la última semana se ha viralizado a través de redes sociales a una familia de antofagastinos, conformada por un matrimonio y tres niñas, quienes salen juntos a vender sus dulces en las calles del sector norte de la ciudad.
La dinámica de esta familia consta de un saludo e improvisación cantada por el padre, mientras que su esposa e hijas realizan coros repetitivos para hacer una venta más divertida.
Y no se detienen solo en cantar, sino que además, participan de bailes e interacciones con los transeúntes, provocando una sonrisa en las personas que pasan cerca de ellos y lograr concretar las ventas de sus dulces y su especialidad, “Los Queques”.