Un periodo de agitación interna vive el Partido Republicano en la región de Antofagasta, debido a conflictos y una serie de millonarias demandas que enfrenta su Presidente Regional Saliente, Fabián Díaz Urrutia.
El proceso comenzó cuando Díaz, quien se desempeñaba como presidente regional del Partido Republicano de Chile, solicitó la reorganización de la directiva regional debido a conflictos internos que, según él, hacían imposible la convivencia y el trabajo en equipo.
Esto llevó a que la Directiva Nacional del partido declarara oficialmente en reorganización a la Directiva Regional de Antofagasta, citando dificultades en su funcionamiento.
Según los Estatutos del Partido Republicano de Chile, la Directiva Nacional tiene la autoridad para declarar en reorganización a las Directivas Regionales con el fin de garantizar el buen funcionamiento del partido en las regiones.
En medio de este proceso de reorganización, el partido designó nuevas autoridades provisionales para dirigir la región de Antofagasta. Andrea Santagostino asume la presidencia, acompañada por Oscar Retamal y Ana María Pizarro como vicepresidentes, Juan Soto como secretario y Pamela Lucero como tesorera.
PRESIDENTE SALIENTE ENFRENTA PROCESOS JUDICIALES
La crisis que afecta al Partido Republicano en Antofagasta no se limita a los conflictos internos. Fabián Díaz Urrutia, el presidente saliente, enfrenta múltiples demandas judiciales relacionadas con su negocio en el rubro inmobiliario. Los procesos judiciales involucran reclamos por sueldos y prestaciones impagas, daño moral e indemnizaciones.
Sorprendentemente, su empresa, una corredora de propiedades, está representada legalmente por su madre, quien también enfrenta acciones legales de naturaleza similar.
Los demandantes alegan que se han producido incumplimientos sistemáticos en el pago de las remuneraciones, falta de entrega de liquidaciones y el no pago de cotizaciones previsionales, a pesar de que se realizaba el correspondiente descuento en las remuneraciones.
Estos procesos judiciales aún están en curso y han arrojado luz sobre la situación legal de Fabián Díaz Urrutia y su madre, añadiendo un nuevo capítulo a la situación que sacude al Partido Republicano de Antofagasta.
Esta inesperada reorganización de la directiva regional y las demandas millonarias en curso plantean interrogantes sobre el futuro del Partido Republicano en la región y cómo esta crisis podría afectar su desempeño en futuros procesos electorales. La situación está siendo observada de cerca tanto por los miembros del partido como por representantes políticos locales.