A pesar de que la temporada estival comenzó hace varias semanas, la situación de las playas en Antofagasta se ha visto afectada debido a la tardanza en la habilitación de servicios higiénicos básicos para sus bañistas.
Un ejemplo de ello es la situación del Balneario Municipal de Antofagasta, lugar que aún no cuenta con baños públicos habilitados.
En el caso del Balneario Municipal, los bañistas relatan que en algunos casos deben acudir a un McDonalds, que se ubica junto a la principal playa de Antofagasta, o bien a otros locales comerciales cercanos, debido a que no hay un baño público habilitado. La otra opción es arriesgarse a utilizar los baños del edificio del balneario, que fue clausurado por la Seremi de Salud pero fue abierto de forma irregular y actualmente una persona está cobrando $500 pesos por su uso.
Una problemática que ha sido recurrente en el Balneario Municipal. Sin ir más lejos, en el verano 2022 fueron múltiples las denuncias de insalubridad y durante el verano del año 2023 la situación no mejoró, ya que el ícono turístico de Antofagasta fue cerrado por la Seremi de Salud de Antofagasta, debido a la contaminación por aguas servidas provenientes precisamente del edificio donde antiguamente funcionaban los baños públicos.
En la oportunidad el alcalde de Antofagasta, Jonathan Velásquez, afirmó que “nosotros hicimos un trato con aguas Antofagasta quienes nos están ayudando a limpiar este sector” y prometió que “el balneario volvería a brillar“.
Sin embargo, pasaron los meses y llegó el verano 2024, donde a pesar de algunas mejoras en la limpieza, encendido de luces y el funcionamiento de duchas, la ausencia de baños públicos sigue siendo un punto crítico, especialmente tras incidentes previos de contaminación por aguas servidas. Y la situación no mejora en el sector de playa La Chimba o playa Trocadero.
De esta forma y de no resolverse la situación en lo que queda de verano, ya se completaría todo el periodo de la administración de Jonathan Velásquez con un balneario municipal en malas condiciones o a medias, y sin baños públicos habilitados para los veraneantes.
Lo anterior, a pesar de que el Balneario Municipal fue uno de los principales caballitos de batalla de Velásquez cuando buscaba postularse como alcalde.
“Me da pena ver tan abandonado este que quizás es el baneario más importante de nuestra ciudad, que no haya nadie de seguridad ciudadana, que no haya ningún inspector municipal, que estén los basureros repletos de basura, no haya control a los vendedores ambulantes y que esté tan abandonado“, decía en 2019 el entonces concejal.
Años después el mensaje se repite, aunque ya no es Velásquez con denuncias en sus redes sociales, sino que son los bañistas, turistas y vecinos de Antofagasta quienes lamentan que transcurridos más de tres años de administración, no hayan soluciones reales y concretas por parte de quien en tiempos de campaña prometía entregarlas.