Hugo Bustamante, el “psicópata del tambor”, ha revelado dos asesinatos adicionales cometidos en 1996. La confesión, obtenida por la periodista Ivonne Toro, llevó al hallazgo de los cuerpos en su casa en Villa Alemana, donde también mató a Ámbar Cornejo en 2020.
1996: Los asesinatos de Elena Hinojosa y Eduardo Páez
En una perturbadora revelación, Hugo Bustamante confesó dos asesinatos cometidos en 1996. Durante entrevistas con la periodista Ivonne Toro, Bustamante reveló que había asesinado a Elena Hinojosa y su hijo Eduardo Páez, quienes habían desaparecido hace 27 años. Los cuerpos fueron encontrados enterrados en el patio de su casa en Villa Alemana, gracias a la información proporcionada por Bustamante.
Según las investigaciones, Eduardo Páez había conocido a Bustamante en prisión y se habían hecho amigos. Ambos obtuvieron la libertad condicional, pero un conflicto por dinero llevó a Bustamante a asesinar tanto a Eduardo como a su madre Elena.
2005: Verónica Vásquez y Eugenio Honorato
El historial criminal de Hugo Bustamante incluye un doble asesinato en 2005, por el cual fue condenado a 27 años de prisión. En esa ocasión, las víctimas fueron su entonces pareja, Verónica Vásquez, y su hijo de 9 años, Eugenio Honorato. Los cuerpos fueron desmembrados y ocultados en un tambor, enterrado en otra vivienda en Villa Alemana. A pesar de este horrendo crimen, Bustamante fue liberado en 2016 bajo un controvertido programa de libertades condicionales.
2020: Ámbar Cornejo
En agosto de 2020, Hugo Bustamante volvió a conmocionar al país al asesinar a Ámbar Cornejo, la hija de su pareja. La adolescente fue violada y asesinada, y su cuerpo desmembrado fue introducido en una nevera y enterrado en su hogar. Las investigaciones policiales concluyeron que Bustamante era el autor intelectual y material de este atroz acto, lo que resultó en su condena a cadena perpetua calificada.
La confesión y el hallazgo de los nuevos cuerpos
El pasado 7 de junio, Bustamante confesó a Ivonne Toro haber cometido dos asesinatos más en 1996. Toro explicó que el trato respetuoso que recibió durante las entrevistas generó en Bustamante la confianza necesaria para revelar estos crímenes. Bustamante le dio la ubicación de los cuerpos de Elena Hinojosa y Eduardo Páez, que fueron encontrados enterrados en su casa en Villa Alemana, el mismo lugar donde ocultó el cuerpo de Ámbar en 2020.
La prima de Ámbar Cornejo, reflejando el sentimiento de muchos, señaló que Bustamante destruye vínculos familiares porque nunca los tuvo en su infancia, un trauma que lo ha convertido en un asesino despiadado. El fiscal jefe de Villa Alemana, Osvaldo Basso, indicó que la confesión responde a un cargo de conciencia, y confirmó que ya existía una denuncia por presunta desgracia de Hinojosa y Páez.
Este impactante desarrollo subraya la oscura y violenta historia de Hugo Bustamante, un individuo cuyo nombre se ha convertido en sinónimo de terror y brutalidad en Chile.