Estudiante estuvo cinco horas encerrada en una sala por parte de la sostenedora del Colegio Alemán de Arica, quien cuenta con antecedentes de agresión física con un martillo en contra de dos alumnas durante la “revolución pingüina” del 2006, en castigo por participar en una toma del establecimiento.
Con el susto de sus vidas andan por estos días los sostenedores de colegios particulares y subvencionados, quienes ven como esa “mesada” constante que reciben mes a mes gracias a la constitución ochentera, sumada a los aranceles que cobran a los papás por “venderles” educación, resulta fuertemente cuestionada en estos días por los estudiantes del siglo XXI.
Y que diga lo contrario Luz Marina Osorio Bahamondes, Representante Legal del Colegio Alemán de Arica, quién apenas monitoreó que la estudiante de Cuarto Año Medio, Lorena Mussa, organizó mediante Facebook una asamblea para que los estudiantes se reunieran a discutir el petitorio nacional de los estudiantes chilenos, se transformó en una verdadera bestia defensora del lucro en la educación.
Según comentó a la prensa la “pingüina” afectada, la sostenedora Luz Marina no encontró nada mejor que intentar callar a la estudiante amenazándola, asegurando que si los alumnos decidían tomarse el colegio, “podría hasta matarla, agarrarla a palos y no recibiría ningún cargo porque ese es un recinto privado“.
La valiente estudiante no se dejó intimidar por esta actitud y continuó su participación activa en la causa estudiantil, citando a una segunda asamblea abierta para el pasado martes 28, a través de Facebook.
Ahí sí que quedó la grande: “Bajamos con mis compañeros a la cancha del colegio, se llenaron todas las graderías y estaban todos callados dispuestos a escuchar, informarse y participar de ésta, pues en Arica ya hay aproximadamente 15 colegios en toma. En eso estábamos cuando llegó la sostenedora y me llevó obligada a su oficina“, relató Mussa a el portal Terra.
Así permaneció cinco horas encerrada en una sala, donde la sostenedora del colegio la acusó de supuestas injurias en su contra que habría recibido en la red social, por cual decidió expulsarla del establecimiento educacional.
Contrariada, la estudiante Lorena Mussa asistió al colegio el día siguiente, para informarse sobre los motivos de la expulsión. Sin embargo, la sostenedora del colegio, Luz Marina Osorio, llamó a Carabineros cuando sus padres se negaron a firmar el documento que aceptaba la expulsión sin especificar los motivos de ésta.
Recurso de protección
Afortunadamente, los padres buscarán que esta discriminación y expulsión por pensar diferente, no quede impune. La familia ya presentó una denuncia en la Secretaría Ministerial de Educación de Arica y demás se presentará un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones, con el fin de velar por la reintegración de la menor al recinto estudiantil.
En tanto, los compañeros de la joven expulsada han entregado todo su apoyo a la estudiante , según consignó La Estrella de Arica.
Colegio con prontuario
Cabe destacar que la dirección del Colegio Alemán de Arica ya es veterana del matonaje contra sus alumnos. Durante la “Revolución Pingüina del 2006”, algunos funcionarios del establecimientos, liderados también por Luz Marina Osorio, ingresaron de manera violenta al establecimiento valiéndose de un martillo.
Incluso, dos alumnas resultaron heridas, siendo llevadas a constatar lesiones por parte de personal de Carabineros, según consignó en esa oportunidad “El Morrocotudo” de Arica. Pese al escándalo que se generó, este tipo de gente sigue a cargo de establecimientos educacionales en el país, recibiendo además el dinero de todos los chilenos para sus fines de lucro particulares.