En la sociedad occidental en la que vivimos, la muerte cuenta con ciertas tradiciones que acompañan a superar el duelo de la pérdida de un ser querido. En esa dirección, para las personas que optan por la cremación, el lugar donde van a descansar sus cenizas puede ser un destino más que exótico y poco común, dando lugar a grandes historias. ¿Qué tipo de lugares son los más extraños para elegir esparcir nuestros restos? En la siguiente nota, te brindaremos una breve lista con algunas de las opciones más peculiares.
Cuando llega la hora del descanso eterno, cada uno puede tener sus preferencias, y eso se puede ver sobre todo en el caso de aquellas personas que optan por ser cremadas. La decisión sobre qué hacer con nuestras cenizas puede ser más que complejo en algunos casos, mientras que en otros la decisión parece estar más que clara, generando historias increíbles que involucran a la familia y seres queridos del difunto. ¿Cuál es el mejor lugar para el descanso eterno? ¿Y cuál es el más exótico? Esas preguntas van a tener diferentes respuestas teniendo en cuenta cada caso. A continuación, una serie de ejemplos que te sorprenderán.
En primer lugar, son muy conocidos los casos de aquellas personas que optan por esparcir sus cenizas en su lugar favorito de vacaciones, ya que en ese emplazamiento están asociados los mejores recuerdos de una vida larga y activa. Ya sea en la montaña, el mar o el campo, la decisión de descansar eternamente en el mismo lugar que nos brindó refugio todos los años es una de las opciones más elegidas. En el caso de las familias que cuentan con una casa de verano, este ritual puede repetirse varias veces, de generación en generación, marcando una costumbre emotiva y movilizante para todos los integrantes del clan.
Ahora bien, hay otro tipo de lugares que resultan mucho más exóticos de pensar, como es el caso de los estadios de fútbol, por ejemplo. Para los amantes del deporte más popular del mundo, descansar eternamente en el mismo lugar que el club de sus amores representa un sueño y los casos se suceden de manera casi diaria. Aún más extraño que ese fenómeno, son aquellas personas que eligen que sus restos sean esparcidos en lugares icónicos como en las atracciones de Disney World, un casino en Las Vegas o la Torre Eiffel, por ejemplo. Esto puede suceder incluso en personas que no llegaron a conocer dichos destinos en vida, lo cual vuelve aún más emotiva la historia.
Por último, otros lugares curiosos pueden ser los patios de juegos de la infancia, la plaza de nuestro barrio o la cima de una montaña que hayamos escalado alguna vez. Una decisión tan íntima y personal no puede tener más que casos particulares y disímiles entre sí. De esta manera, resulta más que interesante poder observar de qué manera esas diferencias que nos convierten únicos en vida, también se mantienen después de la muerte.