Una histórica celebración planifica el Colectivo Cultural Víctor Jara para festejar los 80 años de vida que el 28 de septiembre cumpliría de no haber sido asesinado por la dictadura militar, el destacado actor y compositor musical.
Así, un gran homenaje y un memorial en la nueva calle Víctor Jara son algunas de las actividades que los entusiastas jóvenes preparan para continuar resguardando el legado del artista.
“El primer paso fue cambiarle el nombre a la calle Paihuano, que de ahora en adelante se llamará como esta persona que sólo por cantarle a su país fue cruelmente acallado. Sin embargo, cuando a Víctor Jara lo asesinaron, lo transformaron en un relato mundial, porque plazas y calles de Inglaterra, Francia y hasta Holanda tienen su nombre”, explicó Dennyse Orquera, presidenta del Colectivo, quien indicó que incluso unos días luego de su muerte, científicos rusos descubrieron un planeta menor entre las órbitas de Marte y Júpiter, bautizándolo con el nombre del cantor.
“Si Víctor Jara tiene hasta un planeta ¿Cómo no iba a tener una calle en Antofagasta?”, exclamó la universitaria.
La agrupación espera contar nuevamente con la presencia de la viuda del recordado personaje, Joan Turner, quien visitó la ciudad el año pasado, el mismo día que el Concejo Municipal aprobó la nueva designación de la transitada arteria, sector donde junto al municipio esperan levantar un memorial que simbolizará el cariño que los antofagastinos le guardan a una figura fundamental de la cultura chilena.
Por lo mismo, los “victorjarinos”, como les gusta llamarse, recorrerán las poblaciones aledañas a la calle para preparar las festividades, que contemplan pasacalles y música en la vía pública.
Orquera explicó que las conmemoraciones se centrarán en el natalicio del cantautor y no en su trágica muerte, pues es con una mirada “futurista y esperanzadora” que quieren destacarlo, rescatando su gran sentido de entrega social y creatividad.
“Víctor Jara no se sentía parte de una canción protesta. Al contrario; él cantaba lo que veía, que en ese momento era un mar de gente luchando por cumplir sueños de amor y esperanza. No era algo negativo ni apático, sino inclusivo, alegre y fuertemente pacifista”, detalló la joven, quien no obstante indicó que su grupo sigue muy de cerca el caso judicial de Jara, que sigue abierto y probablemente en vías de esclarecerse.
