Los riesgos que implica el uso del taco y recomendaciones sobre el tipo de calzado que se debe preferir para evitar accidentes y consecuencias a largo plazo, fueron informados a las antofagastinas en una charla realizada en la Universidad Católica del Norte (UCN).
Las características de las calles y veredas de la ciudad, sumados a los problemas fisiológicos que produce este accesorio del vestuario femenino, hacen no recomendable el uso de este tipo de zapato.
Esta información fue entregada por la kinesióloga-ergónoma del IST, Verónica Bastidas, quien explicó las consecuencias negativas que conlleva el uso de tacones en la salud, entre los que se cuentan esguinces y artrosis de rodilla, entre otros problemas.
La charla informativa, organizada por la Dirección de Recursos Humanos de la UCN, reunió a numerosas mujeres, en especial funcionarias de las distintas unidades de la universidad, quienes despejaron dudas y realizaron consultas a la especialista.
“El uso de tacones provoca un cambio de postura y un desequilibrio muscular, que con los años acarrea una degeneración de las articulaciones”, planteó la especialista.
Recomendó a las mujeres usar un taco que no exceda los 3 centímetros, además de realizar elongaciones en forma periódica para favorecer la musculatura.
Añadió que lo ideal es usar un taco que sea ancho en su base, y evitar los de tipo “aguja”, ya que son los que mayores riesgos producen en el sistema músculo-esquelético del cuerpo humano. “Es necesario que el taco sea bajo y que la persona esté pendiente por dónde esté caminando”, acotó.
Indicó que en el trabajo es fundamental usar un taco adecuado, cómodo y blando, y que el tacón solo debe ser utilizado en ocasiones especiales. También señaló la importancia de no conducir vehículos motorizados con tacos, ya que estos pueden quedar atorados en alguna estructura del móvil y provocar accidentes.
