Daniel Rojas Pool fue sentenciado a presidio perpetuo calificado por el secuestro y homicidio de la joven estudiante de Enfermería de la Universidad de Antofagasta.
Tal como se esperaba, el Tribunal Oral Penal de Antofagasta condenó este miércoles a presidio perpetuo calificado a Daniel Rojas Pool (47) por el secuestro con resultado de homicidio de la universitaria Cecilia Julio Bolados, asesinada cuando tenía 21 años en la capital regional.
El autor del crimen que conmocionó a la ciudad de Antofagasta, permanecerá un mínimo de 40 años tras las rejas antes de recibir cualquier tipo de beneficio carcelario, por lo que de salir en libertad, no sería antes de los 87 años.
El juicio contra Rojas Pool, que estuvo cargado de emotividad comenzó el lunes 2 de enero pasado. La fiscal Ana María Escobar presentó 25 testigos, principalmente carabineros y efectivos de la PDI, además de empleados de la empresa Audiocar, donde trabajaba el condenado cuando desapareció la joven, el 27 de noviembre de 2010.
El asesino también tiene antecedentes de una condena de 61 días de presidio menor por hurto de especies en 1995, y dos penas de cinco años y un día de presidio mayor en su grado mínimo, por violación reiterada y robo con intimidación en 1997.
La condena se realizó luego de un juicio cargado de emotividad, especialmente por las expresiones de dolor de la familia de la universitaria, al ser proyectadas imágenes de la joven cuando aún se encontraba con vida.
Las pruebas de la fiscalía incluyeron sets fotográficos de los sitios del suceso, la autopsia y de las pericias que se realizaron a la vestimenta de la joven, a restos encontrados en su cuerpo, y especialmente, a los peritajes realizados por el entomólogo del Labocar, sargento Aarón Jara Peñailillo, cuyo trabajo permitió establecer el secuestro.
No obstante la decisión de la justicia, la familia de la universitaria ha mantenido desde un principio la tesis de que Daniel Rojas Pool no habría actuado solo, tal como lo manifestó en su oportunidad, Sonia Julio Pizarro, tía de la estudiante, quién expresó su confianza de que “una vez cerrado lo de Rojas Pool, si aparecen nuevos antecedentes la investigación continúe”.
Con esta sentencia definitiva en contra de Daniel Rojas Pool, se da por concluída esta etapa en lo que respecta al juicio, ya que el recuerdo de la joven universitaria y el dolor de su familia y amigos ante su partida, sigue siendo la desoladora realidad desde la desaparición y muerte de la estudiante.