Laurence Golborne confirmó la mala noticia para los antofagastinos, quienes deberán seguir recibiendo atención en un centro hospitalario construído durante el año 1966 y que cuenta con graves falencias que colocan en riesgo a pacientes y funcionarios.
Fue el Ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, quien se encargó de despejar las dudas respecto a la fecha de construcción del Nuevo Hospital de Antofagasta, cuyas obras comenzarían recién a mediados del año 2013.
En medio de su visita a la ciudad y en conversación con medios locales, el secretario de estado y una de las pocas figuras del oficialismo con buena aprobación ciudadana, confirmó que son 38 las empresas que compiten por adjudicarse la licitación de la esperada obra, que es además una de las promesas de campaña del Presidente Sebastián Piñera.
“Esperamos recibir las ofertas en el segundo semestre de este año, adjudicarlas, pasar por el proceso de Contraloría de toma de razón de esa adjudicación, para iniciar obras el año 2013”, señaló.
La construcción del nuevo recinto hospitalario es una de las obras de infraestructura que con más anhelo esperan los antofagastinos, toda vez que el actual recinto, inaugurado en 1966, durante el gobierno de Eduardo Frei Montalva, presenta graves falencias en su funcionamiento.
De hecho, el pasado martes 28 de Febrero un paciente vivió aterradores 45 minutos, al quedar atrapado al interior de uno de los viejos ascensores del centro de salud, mientras era trasladado desde la UTI hasta un pabellón para que se le practicara una cirugía.
Durante el gobierno de Michelle Bachelet existió un proyecto para construir un nuevo recinto hospitalario, sin embargo la actual administración rechazó los estudios para su construcción, argumentando que los terrenos se encuentran en zona de inundabilidad por tsunami. Por esta razón se postergó el proceso de licitación, que se inició recién en el mes de diciembre del 2011.
Por mientras, se realizaron reparaciones menores en el actual hospital, tales como pintura en la fachada, trabajos que en la práctica, parecen no resolver los problemas que desde hace años arrastra el principal centro de salud del norte grande, al segur produciéndose situaciones que colocan en grave riesgo a pacientes y funcionarios.
