En el nuevo Hospital Regional de Antofagasta se ha conformado un nuevo equipo médico de especialistas, la Unidad de Paciente Neurocrítico, integrada por un completo staff de neurólogos en turno 24/7, quienes están enfocados principalmente en tratar patologías cerebro vasculares de los pacientes derivados de la región.

Esto, debido a la alta demanda de pacientes con este tipo de enfermedades haciéndose imperativa su conformación. Ante esto, el médico jefe de esta nueva unidad, el neurólogo, Dr. Agustín Brante ya comenzó con todo su puesta en marcha.

Por ello, durante el mes de enero, ya tuvo su primer hito, aplicar un nuevo procedimiento que permitirá a quienes sufran de un accidente o infarto cerebro vascular (ACV) disminuir considerablemente las secuelas y tener un altísimo nivel de recuperación post tratamiento y rehabilitación, teniendo durante el mes de febrero a su segundo paciente con este procedimiento, resultando también exitoso.

El Dr. Brante es enfático en señalar que los accidentes cerebro vasculares son la patología más prevalente con causa de muerte a nivel nacional, siendo anteriormente la cardiovascular, pero que gracias a los protocolos establecidos por los cardiólogos se ha logrado reducir, misma meta que se ha impuesto este equipo local.

Nuevo procedimiento en Hospital Regional:

 

“Trombolisis es este nuevo procedimiento que ya se comenzó a realizar en el Hospital Regional de Antofagasta implementado recientemente, siendo pioneros en la salud pública del norte grande, con dos pacientes que ya tienen increíbles avances de movilidad en sus extremidades afectadas, mucho mayores a las que tendrían sin este tratamiento”, dice el médico jefe de la Unidad de Paciente Neurocrítico.

Explica que “la trombolisis es una droga endovenosa que se aplica cuando ocurren accidentes vasculares agudos disolviendo los coágulos que puedan existir, pudiendo realizarse este tratamiento en ciertos pacientes que debido a sus antecedentes médicos, o resultados de sus exámenes en el momento pueden optar a ella. Es decir, el paciente que esté presentando los síntomas de un ACV debe acudir al Servicio de Urgencia antes de tres horas del inicio de éstos para que pueda estar dentro de los tiempos de respuesta que requerimos, posterior a eso se le realizan pruebas de coagulación y un escáner para detectar si es que hay hemorragia y si no la hay, bajo el análisis de otros aspectos clínicos más, realizamos la trombolisis”.

Los beneficios de este tratamiento son altísimos, ya que los pacientes tienen un mucho mayor nivel de recuperación del ACV, siendo la parálisis la mínima posible, salvándose la mayor cantidad de tejido cerebral que se pueda, resultando un déficit motor y cognitivo mucho menor al ser evaluado a los tres meses de producido el ACV. Esta recuperación varía dependiendo de la zona del cerebro afectada, ya que este órgano tiene una superficie donde están instaladas distintas funciones: motoras, lenguaje, audición, todo lo sensitivo, y de la zona afectada también dependen los síntomas, los cuales pueden ser: parálisis de un hemicuerpo (o lado del cuerpo) o distintos segmentos, parálisis facial, trastorno del lenguaje, pérdida de fuerza en cualquier extremidad, aislada o en conjunto, es decir, dependiendo la arteria que se tapa es el síntoma que se va a producir, los que apuntan para sospecha significando traslado inmediato para el Servicio de Urgencia.

Coordinación en red:

Para que este trabajo sea fructífero, el equipo de la Unidad Neurocrítica ya ha realizado distintas y diversas acciones en la red de salud. La primera de ellas fue capacitar al personal de enfermería del Servicio de Urgencia del Hospital en noviembre del año 2017 sobre este nuevo tratamiento para estar alerta ante las acciones a realizar y efectuar el tratamiento lo antes posible si el paciente cumple los criterios clínicos ya mencionados.

Posteriormente en diciembre realizaron el “Primer curso de Neurología de Urgencias” en Antofagasta junto con la academia científica de estudiantes de medicina de la Universidad de Antofagasta, contando con la asistencia de médicos de los consultorios de atención primaria de Antofagasta, de los Servicios de Atención Primaria de Urgencia (SAPU), personal de enfermería de Iquique, del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU) de Antofagasta y Calama, “poniendo en la palestra este tema y el ACV como punto central en el manejo oportuno de una enfermedad que tiene un tratamiento que cambia el pronóstico funcional y vital si se realiza en el tiempo adecuado. Todo esto, al ser centro de derivación para realizar la primera atención y posterior derivación de los pacientes al Hospital Regional de Antofagasta”, acotó el Dr. Brante.

Junto con ello, se estableció un trabajo interdiscliplinario con las Unidades de Imagenología y Laboratorio del establecimiento médico para estar alerta y con equipamiento disponible para estos pacientes y con un resultado de exámenes en menos de 30 minutos para lograr un tratamiento efectivo. Además de trabajo conjunto con la Unidad de Cuidados Intensivos e Intermedios Adulto del recinto, que es donde se hospitaliza el paciente, contando con camas asignadas especialmente para estos casos.

Rehabilitación:

Brante destaca que “con todo esto también tiene que haber inicio de rehabilitación precoz con kinesiólogo, fisiatra, fonoaudiólogo, siendo fundamental para el paciente, ya que la principal complicación del accidente vascular es la neumonia por aspiración, ya que estos pacientes tienden a tener trastornos de deglución lo que implica que no pueden tragar de forma normal inicialmente, aspirando un contenido bucal o gástrico resultando con una neumonía”.

“La fonoaudióloga es fundamental, ella es capaz de detectar si hay trastornos de deglución de forma precoz y determinar si el paciente necesita una sonda nasogástrica o si va a evolucionar mal, si se debe realizar una gastrostomía o si eventualmente se necesitará que el otorrinolaringólogo haga una video deglución para ver con más detalle las fases deglutorias y eso cambia el manejo”, resalta.

Explica que intentar alimentar a un paciente con ACV es riesgoso, por eso quedan con régimen cero las 24 horas. Pero ese manejo no se conocía antes de que empezaran a hacer turno 24 horas, por eso las neumonias eran muy frecuentes. Señala que “tampoco teníamos fonoaudiólogo en el servicio de neurología, siendo grandes logros que van en directo beneficio de los pacientes de la red pública de salud de la macro zona”.

Teletrombolisis:

 

En la Región Metropolitana se comenzó a implementar el año 2015 un sistema que permitirá que pacientes de zonas alejadas de establecimientos públicos de salud de alta complejidad (como el Hospital Regional de Antofagasta) tengan acceso a este tratamiento a distancia, la que denominaron como “Teletrombolisis”, la que consta de efectuar una primera atención por parte de los hospitales comunitarios alejados de éstos (como Taltal y Mejillones) o de atención secundaria (como Calama y Tocopilla) orientados por neurólogos en turno de urgencia para que realicen una primera atención detectando los signos de derivación y atención clínica para que puedan llegar a tiempo a ser atendidos por los hospitales de alta complejidad como el Hospital Regional de Antofagasta (antes de 3 horas) y aplicar la trombolisis.

El Dr. Agustín Brante manifiesta que “el haber hecho la primera trombolisis en el sistema público es un tremendo logro, es histórico y con ello pretendemos seguir avanzando y ser la primera región del país con este sistema de teletrombolisis, luego de la Metropolitana, incluso pudiendo recibir pacientes desde Copiapó”.

“El Hospital Regional de Antofagasta atiende anualmente 500 casos de accidentes cerebro vasculares y la creación de esta unidad neurocrítica es uno de los grandes avances que hemos tenido en este tiempo que va en directo beneficio de la salud de nuestros pacientes, entregándoles cada día más y nuevas prestaciones, siendo nuestra meta seguir mejorando en diversos aspectos, ya que las necesidades en salud, son infinitas”, concluyó el director del Hospital Regional, Dr. Francisco Bueno Natusch.