
La autoridad enfatizó en la oportunidad, la importancia de evitar la contaminación cruzada, “para ello se debe manipular separadamente mariscos crudos del resto de los alimentos, además de limpiar mesones y cubiertas donde se elaboran las preparaciones”, puntualizó.
El llamado de la recién asumida Seremi, incluyó la exigencia de que todos los productos envasados, congelados o cocidos, deban estar correctamente rotulados y con la fecha de consumo vigente. Por último, y en lo que respecta a las conservas, los tarros no deben estar hinchados, abollados, golpeados, oxidados o con evidencias de haber perdido hermeticidad y con sus claves vigentes.
PESCADOS Y MARISCOS
La personera detalló que la comunidad debe fijarse en el aspecto de los pescados, en el sentido que posean pigmentación bien definida, mucosidad cutánea escasa, transparente, incolora o bien ligeramente opaca. Asimismo su olor debe ser fresco a mar o algas frescas.
Igualmente su superficie debe ser rígida; no se debe hundir ante la presión de un dedo o bien si lo hace, debe retornar de inmediato a su condición normal. Agregó que los ojos del pescado tienen que presentar características como claridad, transparencia, ser brillantes y prominentes.
En relación a los mariscos, la autoridad dijo que la ciudadanía debe fijarse que los bivalvos se encuentren vivos y con sus valvas cerradas. “Si están levemente abiertas deben cerrarse al tocarlas; y su olor debe ser el característico, es decir, fresco y propio”, concluyó.