“El Vaquita” se convirtió en un fiel acompañante en cada marcha por Antofagasta, recibió perdigones, la fuerza del carro lanza aguas, la toxicidad de las lacrimógenas y ahora pasó su prueba más dura, recuperándose del daño que le provocó el impacto de un proyectil en una de sus patas.
Recientemente recibió el alta luego de permanecer más de un mes internado en el PET de la ciudad. “Está sanito de la cirugía. Estuvimos durante todo este tiempo preocupadas de llevar lo necesario para que Vaquita tuviera la mejor recuperación en su post operatorio”, manifestó una de sus cuidadoras, Luz Echanez, a través de redes sociales.
El futuro de Vaquita
Tras su reconocimiento público, existe una familia que ha estado al tanto de sus pasos y manifiestan la intención de adoptarlo, “están dispuestos a cuidar de Vaquita, a recibirlo en su hogar, para que no vuelva a la calle hasta que pase la crisis que atraviesa el país”, comentó en su Facebook, Luz Echanez.
Tanto sus cuidadoras como la familia adoptiva esperan que el perro se adapte a la vida en familia.
