El alcalde de Antofagasta, Jonathan Velásquez, desistió de realizar el polémico enroque de directivos en el municipio, dejando en su antiguo cargo a involucrados en el caso de los “Plan 9 papers”, polémicas conversaciones en Whatsapp que involucran al edil y su círculo.
Mediante una orden de servicio el alcalde resolvió dejar sin efecto los cambios en las direcciones, seis en total, entre ellas la que instalaba como director de operaciones a Rodrigo Silva Alvarado, funcionario que se encuentra bajo la lupa por las acusaciones de diversas irregularidades.
Un nombramiento que llevó a la mayoría de los concejales a convocar la realización de una sesión extraordinaria del concejo municipal, para votar la destitución de la Administradora Municipal.
En esa instancia, el alcalde Velásquez informó que había aceptado la renuncia de la Administradora, por lo que el concejo municipal no podría realizarse, dando por cerrada la sesión tras menos de 3 minutos.
Durante la jornada, además, la mayoría de los directivos del municipio firmaron una carta que da cuenta de los quiebres y tensiones internas en la administración municipal. En el documento el cuerpo directivo del municipio expresa su preocupación por la falta de comunicación y fundamentación en las decisiones tomadas por la administración de Jonathan Velásquez y el impacto de estas en la comuna, advirtiendo el estancamiento que sufre la ciudad.
Lo anterior, en relación a los traslados de funcionarios, “enroques” en las direcciones y nombramientos de involucrados en el caso “Plan 9 Papers”, varios de los cuales aún se mantienen en funciones en el municipio a pesar de su vínculo con los polémicos chats.