El Juzgado de Letras del Trabajo de Antofagasta acogió -el pasado viernes 28 de abril – la demanda interpuesta contra la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Antofagasta por el despido injustificado de Eduardo Araya, quien se desempeñaba como guardia de seguridad en la escuela D-74, Maximiliano Poblete.
El fallo (causa rol 84-2017), dictado por la magistrada Yohana Chávez, estableció la existencia de un contrato de trabajo entre las partes desde el año 2004, al que se puso término el 29 de diciembre de 2016, aludiendo a la causal del artículo 160 N° 6 del Código del Trabajo, esto es, “el perjuicio material causado intencionalmente en las instalaciones, maquinarias, herramientas, útiles de trabajo, productos o mercaderías”.
“(…)Que, si bien es cierto, que se ha demostrado por la demandada en estos autos que el actor con su accionar produjo daño en dos cámaras de las que se encuentran instaladas en el Colegio, no se logró acreditar que este hecho ocurriera con la intención de causar daño en las mismas, toda vez que si bien reconoce que manipuló las cámaras su intención era redirigirlas hacia los sectores que a su juicio la seguridad era vulnerable”, establece el fallo.
La resolución señala que “se declara injustificado el despido de que fuera objeto el actor con fecha 29 de diciembre de 2016, por consiguiente la demandada deberá pagar las siguientes prestaciones:
1.- $1.389.906.- por concepto de indemnización sustitutiva de aviso previo.
2.- $15.288.966.- por concepto de indemnización por 11 años de servicio.
3.- $12.231.172.- equivalente al 80% de incremento sobre la indemnización por años de servicio.
4.- $509.630.- a título de 11 días de feriado legal.
5.- $694.950.- a título de 10.9 días hábiles de feriado proporcional.
