El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Calama condenó a un sujeto identificado como Alan Alejandro Sepúlveda Espinoza a las penas de 12 años y seis meses y 5 años y un día de presidio efectivo, en calidad de autor de dos delitos de homicidio simple, en grado de consumado y frustrado, respectivamente.
Los ilícitos fueron perpetrados en abril de 2018, en la una plaza de la ciudad.
El tribunal dio por acreditado que alrededor de las 13:30 horas del 7 de abril de 2018, las víctimas, los hermanos Felipe y Manuel Albornoz Peralta se encontraban en la plaza ubicada en la intersección de calle Santiago Humberstone y Pasaje Jorge Alvear Urrutia de Calama. A ese lugar se “acercó Alan Sepúlveda Espinoza conduciendo el vehículo de color blanco marca Kia, acompañado de Yang Michea, quienes les señalan ‘oye, se creen vivos’, insultándose mutuamente, continuando la marcha del vehículo”.
Posteriormente, Michea bajó del móvil y continuó la discusión con los hermanos referidos y, simultáneamente, Sepúlveda ingresa nuevamente por el Pasaje Alvear Urrutia contra el sentido del tránsito, acelerando el vehículo e impacta a Felipe Albornoz Peralta, quien cae sobre el auto y luego al suelo, se reincorpora un momento y vuelve a caer.
Acto seguido, Alan Sepúlveda se bajó del vehículo con un arma cortopunzante, y se dirigió hacia Manuel Albornoz propinándole una estocada en el tórax por el lado izquierdo y otra herida en la mano derecha, luego de lo cual Sepúlveda y Michea se retiran del lugar.
Las víctimas fueron auxiliadas por dos testigos de los hechos, quienes las trasladaron en un vehículo hasta un servicio de urgencias, “en el trayecto Manuel Albornoz le manifestó a Felipe que había sido apuñalado por el Chino, el de pelo rubio, que era quien conducía el vehículo. Sin embargo, al llegar al servicio de urgencia, Manuel Albornoz fallece producto de un shock hipovolémico, secundario a herida por arma blanca localizada a nivel torácico con compromiso pulmonar y cardiaco, según concluye el informe de autopsia”, agrega.
“Posteriormente, ese mismo día Sepúlveda Espinoza tomó contacto con Pablo Torres Rojas, quien en compañía de Yang Michea lo trasladó hasta la parcela de la madre de su polola, ubicada en las tomas, en dirección hacia la cascada y se mantuvo oculto allí unas horas, dejando el vehículo marca Kía color blanco en el Pasaje Isabel La Católica”, concluye.
En fallo unánime el tribunal –integrado por los jueces Salvador Garrido Aranela (presidente), Luisa Antipán Meliqueo y Armando Puelles Rojas (redactor)– aplicó, además, a Sepúlveda Espinoza las accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para cargos, oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares mientras duren las condenas.
En la causa, el tribunal decretó la absolución, por falta de pruebas, de Yang Álex Michea Cruz y Joaquín Camilo García Sepúlveda, de la acusación fiscal que los sindicaba como autor y encubridor de los delitos.
Una vez que el fallo quede ejecutado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestra biológica del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
