A solo cuatro días de conmemorar el Día de La Mujer -el próximo martes 8 de marzo-, te contamos sobre uno de los tipos de violencia de género más invisibilizados que existe en nuestro país; el Suicidio Femicida. Este tipo de violencia, al igual que muchos otros, no es reconocido por el SernamEG y, al no ser tipificadas como delito, tampoco tienen castigo penal, manteniendo la impunidad del agresor.
Según un estudio realizado por la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, los Suicidios Femicidas son “aquellos cuya causa se encuentra en el único límite posible a la agresión recibida por sus convivientes, amantes, esposos, acosadores; como ‘única salida’ ante una muerte inminente”. Y no es que el acosador haya planificado el asesinato como tal, si no que buscan que la víctima “se mantenga subordinada y dominada. Por lo que ellas terminan viendo el suicidio como un escape”, según explicó la abogada feminista y vocera de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, Lorena Astudillo.
Nueve casos en Chile:
En el año 2016 la agrupación comenzó a visibilizar situaciones de suicidio bajo violencia machista y hoy mujeres de Hermanas (os) en el Dolor, La Cuchara Feminista y Memorial Feminista trabajan en el Primer Registro Nacional de Víctimas de Suicidio Femicida, con el fin de graficar y obtener estadísticas de este tipo de violencia que, entre 2016 y 2021 ha registrado nueve casos en Chile, de los cuales la mayoría de sus familias han tomado acciones legales, logrando que cuatro de los agresores estén privados de libertad. ¿Conoces sus historias?
Antonia Garros (23): Se lanzó desde el departamento de su pareja Andrés Larraín (35) la noche del 6 de febrero de 2017.
Antonia Barra (21): Se quitó la vida en octubre de 2019, casi un mes después de haber sido violada por Martin Pradenas, quien se encuentra en prisión preventiva.
Jaqueline Calfulaf: Terminó con su vida el 20 abril 2020. Sus cercanos aseguran que fue constantemente acosada por su pareja.
Anaís Godoy (16): Se quitó la vida luego que la Fiscalía de su localidad archivara su caso como víctima de violación a sus 14 años, en fiestas patrias de 2018.
Daysi Compay (20): El 2 de agosto de 2020 terminó con su vida mientras estaba embarazada, tras sufrir abusos físicos y psicológicos prolongados por parte de su pareja Jorge Barrientos.
Karina Cuevas (21): Falleció el 20 de enero de 2021 por daño hepático tras consumir alta dosis de medicamentos, luego de haber sido abusada sexualmente por un amigo durante la celebración de año nuevo.
Francisca Moll (37): Se suicidó el 9 de abril de 2021, tras sufrir un constante acoso de su ex pareja. Contaba con denuncias por constantes agresiones y dejó una carta explicando que era la única salida para proteger a su familia.
Amira Godoy (16): Se quitó la vida el 10 de abril de 2021 tras sufrir violencia sistemática por parte de Matías Céspedes, con quien tuvo una relación por 5 meses.
Franshesca González (18): Fue encontrada muerta en la casa de su pololo el 24 de abril de 2021. Según las pericias fe suicidio, pese a que contaba con denuncias por VIF.
Suicidio Femicida como delito:
Durante la primera semana de marzo, representantes de distintas agrupaciones feministas junto a las madres de dos víctimas de este tipo de agresión, entregaron una carta a Antonia Orellana, quien el próximo viernes 11 asumirá el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, en la cual solicitan la tipificación del Suicidio Femicida para que la impunidad a los responsables de este tipo de violencia logre ser erradicada en nuestro país. Al mismo tiempo, interpelan a la futura ministra en Change.org gestionar la tipificación de este.
Asimismo, los casos podrán ser denunciados en los correos elsuicidiofemicidaexiste@gmail.com, lacucharafeminista@gmail.com y memorialfeminista@gmail.com.
