Técnico paramédico falleció en el recinto asistencial esperando atención, lo que motivó una espontánea manifestación exigiendo salud digna para los habitantes de Antofagasta que carecen de recursos para pagar las costosas clínicas privadas que florecen en la ciudad.
Una espontánea y sentida manifestación de repudio, realizaron funcionarios del Hospital de Antofagasta, luego del fallecimiento de una funcionaria al interior del recinto.
La técnico paramédico Jessica López, sintió molestias al inicio de su jornada de trabajo, pero fue devuelta a sus labores. Durante al camino al Policlínico de Oncología se desvaneció, siendo asistida por personal del recinto que circulaba por el lugar. Sin embargo, finalmente perdió la vida en la misma Unidad de Emergencia donde poco antes había recibido atención.
El caso, trae nuevamente al centro del debate el histórico desfinanciamiento que sufre la salud pública en la región desde que la actual constitución consagrara el modelo de estado subsidiario, lo que se traduce en una escasa inversión para garantizar una salud pública, gratuita y de calidad para sus habitantes.
Por el contrario, en la ciudad la mayor parte de los especialistas ejercen en consultas privadas, cobrando altos precios por atención, dado que el sistema público no cuenta con el financiamiento necesario para pagar por sus servicios.
