El 02 de marzo del 2012, es una fecha que quedó marcada en la memoria de las y los chilenos, aquel día, muchos conocieron un problema social que afecta a muchas personas: la homofobia.
Aquella noche, Daniel Zamudio, de 24 años, fue interceptado por cuatro hombres, Patricio Ahumada Garay (condenado a presidio perpetuo simple), Alejandro Ángulo Tapia, Raúl López Fuentes (condenados a 15 años de cárcel) y Fabián Mora Mora (condenado a siete años de prisión), quienes insultaron y torturaron cruelmente a raíz de su orientación sexual por varias horas, para finalmente abandonarlo en el lugar.
Cerca de las 4:00 de la madrugada, un guardia del parque San Borja, encontró a Daniel, quien se encontraba inconsciente, con muchas heridas, fracturas en su pierna, quemaduras de cigarros y marcas de esvásticas.
Pese a que aquel guardia encontró a Daniel con vida, lamentablemente su situación era crítica y tras pasar 25 días en la Posta Central, el joven de 24 años, falleció.
El macabro crimen, marcó un antes y un después en la historia de los derechos LGBTQIA+, puesto que llegó a personas, a familias y sus corazones y transcendió las fronteras, siendo noticia y debate a nivel internacional.
A raíz de este lamentable hecho, se conoció la primera sentencia por un crimen homofóbico en nuestro país y aceleró la tramitación de la Ley Antidiscriminatoria, a un punto que fue aprobada tres meses después del asesinato de Daniel y tras siete largos años de debate parlamentario.
LEY ZAMUDIO
De acuerdo a lo señalado por el Movilh, la Ley antidiscriminatoria, también conocida como Ley Zamudio, ha dejado resultados dulces y agraces.
Según lo expuesto en su página oficial, “por una parte, el Estado aún no resuelve las graves deficiencias de la Ley Zamudio. A 10 años de su entrada en vigencia, apenas 495 personas la han usado y solo en 280 casos hubo sentencias, la mayoría contrarias a las expectativas de las víctimas. Tanto en así, que en lo referente a delitos, apenas en 5 ocasiones se ha aplicado la agravante que contempla la ley”.
“Entre otras deficiencias de la ley, se encuentra la ausencia de una institucionalidad antidiscriminatoria, la multa al denunciante sino se comprueba discriminación, el deber de la víctima de probar el abuso, la carencia de indemnizaciones y la imposibilidad de cuestionar fallos o sentencias discriminatorias”, agregan desde la organización.
Pese a lo señalado, la Ley Zamudio se ha transformado en la “principal herramienta jurídica para ir avanzando a otras mejores condiciones de igualdad legal y en la implementación de nuevas políticas públicas. En efecto, la Ley Zamudio ha sido la principal llave para abrir la puerta a más avances, en tanto todos los futuros avances tienen como fundamento y argumento la norma, en particular su segundo artículo que prohíbe la discriminación por orientación sexual, identidad de género y expresión de género”, destacan desde el Movilh.
CRIMENES DE ODIO
Lamentablemente la historia de Daniel no ha sido la única en Chile, desde su muerte, 37 personas LGBTIQA+ han sido asesinadas por su orientación sexual o identidad de género, como es el caso de Nicole Saavedra Bahamondes.
