La Federación Minera de Chile y el Sindicato de Minera Spence aseguraron que el gobierno se equivoca en su intención de resolver conflictos sociales encarcelando a estudiantes y trabajadores.
No solo los estudiantes han expresado su rechazo a la denominada ley anti-tomas, proyecto enviado por la administración Piñera para su discusión en el congreso con el fin de “resguasdar el orden público” y combatir las protestas sociales.
También lo hicieron importantes líderes de la minería, que desde el norte del país, hicieron pública su solidaridad con los estudiantes de todo Chile y manifestaron que los trabajadores también serán afectados si se llegara a poner en práctica esta ley.
En ese sentido, la directiva del Sindicato de Trabajadores de la Minera Spence, criticó duramente las modificaciones que el oficialismo pretende realizar al código penal. El presidente del sindicato de la citada minera privada, Ronad Salcedo, señaló que “en el ámbito de los trabajadores, sin duda que se trata de una verdadera “ley maldita” para el sindicalismo chileno , ya que convierte en delito las únicas herramientas verdaderamente efectivas con que cuentan los trabajadores al momento de exigir una justa retribución a su esfuerzo y mejores condiciones laborales”.
Agregó que “al sancionar con presidio las tomas y ocupaciones de lugares como oficinas públicas e iglesias, queda claro que el gobierno busca desarticular la organización de los trabajadores”.
Gobierno criminaliza la movilización social
De igual modo opinó el Presidente de la Federación Minera de Chile, Cristian Arancibia, quien sostuvo que “el proyecto de ley impulsado por el gobierno, criminaliza la movilización social en momentos en que existe un clima de descontento generalizado producto de numerosas promesas incumplidas”.
“ Se trata de una respuesta inadecuada a los problemas que enfrenta nuestro país y el gobierno se equivoca el camino al intentar resolver los conflictos metiendo a la cárcel a los estudiantes o trabajadores”, concluyó.
